Estudiantes de La Plata evacuó su sede y suspendió todas las actividades sociales y deportivas, tras recibir hoy nuevas amenazas telefónicas de parte de la barra brava del club, que anoche protagonizó en ese lugar una feroz interna a tiros.

Las intimidaciones se suman a las recibidas por el vicepresidente primero, Oscar Cassata, víctima de un llamado en las últimas horas que lo advirtió sobre su intención de cortarle los privilegios a los violentos. "Esto no termina acá", lo alertó una voz anónima como nueva amenaza tras las pintadas recibidas en su domicilio para que abandonara su cargo.

"Esto es inadmisible y hay que tener tolerancia cero. El club no vive de los barras, que ni se acerquen. En la sede hay seguridad privada y no podemos tener gente armada. Hay una gran actividad en el lugar y está la presencia de muchos chicos", le dijo a Télam el directivo Martín Ordoqui.

"Por lo que yo sé, no hay entrega de generales ni nada por el estilo. A mí mucho no me quieren porque los enfrenté. Lo que sí hacemos es darle entradas a las agrupaciones y colaboramos con el alquiler de algún micro para que viajen, y son ellos los que manejan la tribuna. Por eso, los barras tienen esas reacciones", explico cuando fue consultado sobre el vínculo de la hinchada con la dirigencia.

En relación a los incidentes de anoche, en el club circulan dos versiones: la primera, que se trató de una enfrentamiento entre dos facciones de la barra y la segunda, que fue un mensaje a la Comisión Directiva.

El conflicto en la barra de Estudiantes data de tres años atrás y cuenta con diversas manifestaciones de violencia como la ocurrida en marzo de 2010, cuando un tiroteo entre dos grupos terminó con la vida del policía Sergio Rodríguez, en una estación ferroviaria. Por ese hecho, se dictó prisión perpetua para Mauricio Gallardo y Raúl Gómez, la pasada semana en el juicio oral.

Frente a los sucesos, la dirigencia de Estudiantes admitió como "una posibilidad" que el próximo partido del torneo Inicial ante Vélez en Liniers se juegue sin hinchas platenses, aunque la decisión será potestad de la AFA y la Subsecretaría de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos (Subsef).