Todos los caminos conducen a la continuidad de Morant

Tras buscar y hablar con diferentes técnicos, la Comisión Directiva de Colón optaría por darle la chance de dirigir el primer equipo a la dupla Morant-Goux.

En las próximas horas la dirigencia rojinegra haría el anuncio oficial: Pablo Morant será oficializado como entrenador de Colón, acompañado por Marcelo Gouz. Además, Pablo Virgilio sería el preparador físico.

 "Lo que uno trata de hacer hincapié es en la situación emocional que uno la vivió como jugador. La personalidad y el carácter deberían aflorar. Como todo el fútbol argentino, uno está sorprendido por el mal momento de Colón donde los resultados no se han dado. Es difícil hacer un análisis: un gran técnico, un estadio lleno siempre, un equipo con capacidades individuales para estar más arriba. Estamos para dar una mano para atravesar este momento", dijo Morant.

En su extensa trayectoria como futbolista, Morant conoce de estos presentes en los equipos cuando los resultados no son positivos: "Estamos hablando desde el lugar de alguien identificado con el club. Lo primero es tratar de salir de este momento desde lo futbolístico. El acompañamiento y el apoyo a los colores para que todos colaboren para salir de esta situación, dar todo de sí para Colón. Sorprende pero es la realidad".

"Los jugadores asumen la responsabilidad, este mal momento es en gran medida de ellos, sé que lo van a revertir. Son conscientes que están atravesando un mal momento. Veo que el jugador deja todo en los entrenamientos y quiere salir de la situación, eso se vislumbra claramente".

"Estoy convencido de la decisión que vayamos a tomar, en caso de dirigir, será lo mejor para la institución. Analizamos como trabajadores del club, con el sentimiento que le tenemos a la institución, que teníamos que apoyarlos. Lo que ellos pidieron (dirigentes) es que los chicos miren como horizonte a Tigre. Los jugadores tienen que estar preparados para ese encuentro, Tienen que sacar la cabeza. Fuesen dos o tres días, no lo sabemos, el objetivo y el horizonte está en el partido contra Tigre".

En aquel plantel que le tocó dirigir en 2003 se encontraban Moreno y Ramírez, algo que el propio protagonista se encarga de reafirmar: "Jugué con Iván y Tito pero no tuvieron la chance de jugar cuando yo estuve dirigiendo. Acá uno no habla de nombres sino de un grupo. Le ganamos al Boca de Bianchi en aquel interinato, después empatamos con Vélez. Tengo un buen recuerdo de aquel paso porque los jugadores tuvieron un comportamiento ejemplar en todo momento".