Destituyen a juez correntino acusado por un escándalo
El Jury de Enjuiciamiento de Corrientes destituyó este miércoles a un juez de la provincia por "mal desempeño de sus funciones fuera del ámbito laboral", tras acusarlo de protagonizar un escándalo con una joven y su novio a la salida de un boliche bailable.
Ramón Francisco Ramírez, de 58 años, fue destituido del cargo de juez de Instrucción de la ciudad de Saladas, a 100 kilómetros de la Capital correntina, donde cumplía esa función desde 2008.
Los integrantes del Jurado de Enjuiciamiento lo destituyeron por unanimidad al sostener las acusaciones que se encontraban en la denuncia que en 2012 realizaron el propio fiscal de Instrucción de Saladas, Osvaldo Ojeda, y el Fiscal General del Poder Judicial de Corrientes, César Sotelo.
Por ejemplo, en uno de los hechos denunciados, una mujer acusó a Ramírez de agredirla verbalmente a la salida de un local bailable de Saladas, en horas de la madrugada, cuando ella cruzaba por la vereda, y de pelearse a golpes con un hombre que la acompañaba, además de amenazar con meterlo preso.
Textualmente, el expediente menciona que en ese momento, Ramírez le gritó a la joven: "Mamita, vení acá para adentro que tenés hermosa colita, vení, que te voy a hacer crecer".
Esa denuncia, que es la más grave, relata además Ramírez "estaba bien borracho, tenía un vaso de cerveza en la mano, igual que los otros muchachos que parecían policías de civil y que estaban con él".
En otro caso denunciado, se acusó al juez destituido de haber protagonizado, el 26 de junio de 2012, un episodio en aparente estado de ebriedad, cuando llegó a un destacamento policial y le habría pedido a un agente de la Policía correntina que manejara su automóvil porque él no podía hacerlo en esas condiciones.
Durante el juicio político, que terminó en la tarde de hoy, el fiscal Sotelo expresó que "la vida privada de un magistrado debía ser decorosa porque está establecido en el Código de Ética que rige la conducta de los jueces".
En ese sentido, Sotelo aseguró que "se probó además su estado de ebriedad y que su comportamiento provocó conmoción en una localidad pequeña como Saladas".
Tras la sentencia, Ramírez señaló en declaraciones a la prensa que el Jury y la Fiscalía General "activaron un complot" en su contra y que "en un algún momento se va a demostrar".