Neumococo: claves para prevenir su contagio
Es una bacteria que puede causar enfermedades muy graves como meningitis y neumonía; Afecta a todas las edades y es una de las principales causas de muerte en Latinoamérica.
Las cifras son alarmantes, y quiza la mejor prueba de que la lucha contra la bacteria S. pneumoniae, más conocida como neumococo, todavía no está terminada. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en América Latina cada 60 minutos ocurren 5 muertes y 25 hospitalizaciones relacionadas con alguna de las enfermedades que causa, y en total es responsable de más de 1,6 millones de muertes cada año en la región, la mayoría de niños pequeños y adultos de edad avanzada.
"La enfermedad neumocócica afecta los extremos de la vida: a los niños menores de 2 años, cuyo sistema inmunológico no está desarrollado, y a los adultos a partir de los 50 años, en especial a los mayores de 65, y mucho más si tienen una enfermedad crónica o inmunodepresora de base, como cáncer, diabetes o sida", explica el doctor Daniel Jorge Curcio, uno de los médicos y expertos en salud pública que disertaron en la Conferencia Latinoamericana sobre Enfermedad Neumocócica 2013, que se llevó a cabo el pasado abril en la Ciudad de Panamá, organizada por Pzifer.
¿QUÉ ES Y CÓMO PREVENIRLO?
El neumococo puede causar diferentes infecciones: neumonía (en los pulmones), meningitis (en el sistema nervioso central), sepsis (en la sangre) y otitis del oído medio. De todas estas enfermedades, la primera es la más común y por lo tanto la más grave. Solamente en la Argentina, Brasil y Chile hay más de dos millones de casos de neumonía al año.
La bacteria se encuentra en la nariz y en la garganta de niños y adultos sanos. De hecho, se estima que el 60 por ciento de los niños menores de cinco años son portadores de neumococo. Como aún están desarrollando sus defensas, les cuesta hacerle frente a las bacterias y esto es más riesgoso en niños que no son amamantados. Concurrir a una guardería, convivir con fumadores y vivir en la pobreza o hacinados también aumenta sus chances de enfermarse. Las infecciones son más frecuentes en los meses de invierno y se transmiten de persona a persona al igual que una gripe o un resfrío: por las gotas de saliva que se dispersan en el aire al toser, estornudar o besar.
El doctor Alejandro Cané, especialista en en el tema que también trabaja en el desarrollo de vacunas para Pfizer, afirma que "esta bacteria es sumamente inteligente —porque es capaz de modificarse—, democrática y universal. La clave está en bajar la portación de los niños (en nariz y boca) para evitar el contagio y la expansión. De esta manera, con la vacunación de los más chicos, se lleva a cabo una protección indirecta, o de rebaño, que concluye en una ecuación muy simple: si los niños están vacunados, los adultos que viven con ellos se enferman menos".
En la Argentina, como en otros 70 países, la vacuna contra el neumococo es obligatoria y gratuita porque forma parte del Calendario Nacional de Vacunación. Desde 2010, la vacuna que se utiliza es la 13 valente (Prevnar 13®), que protege contra las 13 cepas más importantes de las 90 que se conocen de la bacteria. El esquema que se usa en nuestro país es de dos dosis (a los dos y a los cuatro meses de vida) y un refuerzo al cumplir el año. Pero todo niño y niña menor de cinco años puede vacunarse gratis en cualquiera de los centros vacunatorios del país.
UNA DEUDA PENDIENTE
Todos sabemos que a los chicos hay que vacunarlos, y salvo casos excepcionales, no solemos cuestionar el esquema de vacunas obligatorias que el pediatra nos indica. Por eso, la prevención de enfermedades neumocócicas, entre otras, arroja números positivos en la población infantil y las muertes disminuyen considerablemente en aquellos países que incorporaron la vacuna a sus calendarios.
Pero ¿qué sucede en el caso de los adultos? ¿Cuántas personas sanas se vacunan hoy en día sólo por prevención? "Si a la salida de un hospital les preguntamos a los pacientes por qué no se vacunan, la mayoría va a decir que no lo necesita o que su médico no le dijo, porque el concepto de prevención todavía no está instalado", explica Curcio.
Sin embargo, la edad es uno de los factores de riesgo más significativos y a medida que la población mundial envejece, el número de personas en riesgo por la enfermedad neumocócica aumenta. Para el 2040, más de un tercio de la población de América Latina tendrá más de 50 años, con una esperanza de vida por arriba de los 80, y esto impacta directamente en la economía de los Estados, porque si no se vacuna a esas personas —para evitar que deban ser internadas y tratadas por meningitis o neumonía—, el gasto en salud pública será elevadísimo e imposible de solventar. En la actualidad, en nuestro país, por cada neumonía que requiere atención médica se gastan US$2741 y por un cuadro grave, US$3708.
CUANDO LA EDAD IMPORTA
A partir de las cinco décadas, la curva de incidencia de la enfermedad comienza a ascender, y luego de las investigaciones realizadas con la vacuna conjugada 13 valente se determinó que la respuesta inmunológica es mucho mejor a esta edad que a los 65 años: por eso, la recomendación es vacunarse al cumplir los 50. Asimismo, es posible que en esta etapa de la vida el paciente fume o lo haya hecho por muchos años —esto aumenta hasta cuatro veces la posibilidad de contraer la enfermedad— y presente alguna patología crónica o de base que deprima sus defensas, haciéndolo más vulnerable a contraer una neumonía, que en muchos casos lo puede llevar a la muerte. Incluso, una vez adquirida la enfermedad neumocócica en un paciente de mediana edad o avanzada, es difícil de tratar porque los antibióticos han provocado que muchas cepas se vuelvan cada vez más resistentes y el organismo poco a poco va perdiendo la habilidad de reaccionar a las infecciones. Esto provoca sucesivas recaídas o internaciones e incluos puede ser causa de muerte en pacientes con otra patología de base.
Ante esto, la solución es anticiparse y pensar en los beneficios a largo plazo que conlleva la prevención en todo lo que esté relacionado con la salud. Ya que viviremos más años, aprovechemos para hacerlo de forma más saludable..