Decidido a dar un golpe de efecto para recuperar terreno político tras la derrota electoral y un día antes de la puesta en marcha del diálogo social con empresarios y gremios, el Gobierno dispuso ayer que el Estado recupere formalmente la administración y el control de las líneas San Martín, Belgrano Sur y Roca, que estaban en manos de Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia SA (UGOFE), conformada por las empresas Metrovías, TBA y Ferrovías.

La resolución, que fue firmada en la tarde de ayer por el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y aparecerá publicada hoy en el Boletín Oficial, establece que la Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (SOFSE) tendrá a su cargo la prestación de los servicios de las tres líneas. En tanto que la Administración de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) controlará la gestión de las obras de los ramales. Además, según el texto de la resolución a la que tuvo acceso El Cronista, las empresas que integran la UGOFE continuarán operando los servicios por un plazo de 90 días, período en el cual se efectivizará la transferencia del acuerdo de operación al Estado. Solo en los primeros cinco meses del año la UGOFE recibió $ 1.295 millones en subsidios estatales destinados a financiar la operación de las tres líneas. En 2012 la asistencia estatal superó los $ 3.000 millones, más del doble del monto total de subsidios de 2011 ($ 1.100 millones).

Fuentes del Ejecutivo vincularon la medida a la estrategia oficial para avanzar “hacia la estatización plena” del sistema ferroviario y adelantaron que el próximo paso apuntará a recuperar la administración de las líneas Sarmiento y Mitre. Desde el año pasado, tras el trágico accidente de Once que puso fin al contrato de concesión de TBA, ambos ramales son operados por la Unidad de Gestión Operativa SA (UGOSA), integrada también por las empresas Metrovías y Ferrovías, ambas del Grupo Roggio.

La nueva medida se inscribe en el denominado Programa de Reordenamiento del Sistema Ferroviario que el Gobierno puso en marcha en mayo pasado con la reestatización del servicio del Belgrano Cargas, cuya administración y operación quedó a cargo de una nueva empresa estatal (Belgrano Cargas y Logística SA), situación que eliminó a los operadores privados del manejo de la línea. Un mes después, el 4 de junio, Randazzo dispuso que el Estado recupere el control del servicio de trenes de cargas que era operado por la empresa América Latina Logística (ALL), de capitales brasileños, y del Tren de la Costa por supuestos “graves incumplimientos” con los contratos de concesión.

Para avanzar en la instrumentación del reordenamiento de las líneas del Roca, San Martín y Belgrano Sur, Randazzo recibirá hoy a los representantes de los gremios ferroviarios (La Fraternidad, Unión Ferroviaria, señaleros y jerárquicos), que ayer anticiparon su apoyo a la nueva medida al advertir que se trata de un histórico reclamo de los sindicatos del sector. “Esto lo venimos pidiendo hace mucho tiempo en la lógica de nacionalización del sistema ferroviario”, señaló a este diario Omar Maturano de La Fraternidad.