Colón volvió a perder y hubo insultos para todos

El Sabalero cayó por 1 a 0 ante Arsenal en Santa Fe y el público pidió al unísono "que se vaya todos". Además de cinco derrotas al hilo, acumula 461 minutos sin hacer un gol. Se fue el técnico que apenas cosechó el 33% de los puntos

Aún cuando la convocatoria no fue de las mejores, el público presente no tolera más esta situación y mostró su malestar con la dirigencia. ya durante el partido se escucharon algunos cánticos contra jugadores y dirigentes, y ni hablar cuando se consumó la quinta derrota consecutiva sin goles a favor, todo el estadio se hizo sentir al grito "que se vayan todos y no quede ni uno solo". También arremetieron contra el Presidente Lerche, a quien le dedicaron canciones agresivas desde todos los costados, incluso al ser consultado el público rojinegro a la salida del "Brigadier López", la mayoría optó por apuntar los cañones a la CD y a su conductor. El primer fusible que saltó fue el del técnico: renunció Forestello


Arsenal hizo lo que hace casi en todos sus partidos. Planteó un juego trabado, con pocas situaciones de riesgo y lo ganó cuando casi nadie lo pensaba, tras usufructar de manera casi perfecta sus magras chances de gol. Hoy fue 1-0 ante Colón, en Santa Fe, para escalar hasta el segundo lugar del Torneo Inicial, junto a San Lorenzo, con 20 puntos.

El equipo de Alfaro, que en la semana había sellado su pasaje para la final de Copa Argentina, se metió de lleno en la pelea por el título gracias al solitario tanto de Julio Furch, quien a los 30 del complemento vulneró a Montoya, con un cabezazo, tras capturar un rebote en el arquero luego de haberlo fusilado desde casi el área chica.

Colón, en cambio, padeció su falta de puntería y la buena tarea de Campestrini, y terminó cosechando su quinta caída consecutiva en medio de un trámite muy equilibrado. En la más clara del Sabalero, Curuchet remató al palo, luego de desairar a dos marcadores. Iban 0-0 y se pudo contar otra historia.

Cinco derrotas sin goles a favor. Sólo comparable con el Clausura 2006 cuando de la mano de Bauza y Sciaqua (interino) perdió siete seguidos, al tiempo que en el inicio del Apertura de ese mismo año, perdería cuatro consecutivos con Toresani, para redondear una nefasta serie de 11 derrotas en fila.