Más allá del ejercicio físico y hacer cinco comidas diarias, es esencial para adelgazar un estilo de vida saludable que incluya buenas prácticas complementarias. Según la ciencia, estos son ocho hábitos diarios que te ayudan a bajar de peso.
1. Dormir bien
Dormir poco tiene muchos efectos que pueden afectar indirectamente al peso, como sentirte cansado y, en consecuencia, recurrir a alimentos hipercalóricos para suplir la falta de energía. Una investigación del Centro de Estudios Psicobiología y Ejercicio de la Universidad de San Pablo, Brasil, asegura que la falta de sueño provoca que el organismo segregue una serie de hormonas que ralentizan la síntesis de las proteínas.
2. Bañarse con agua fría
Darse duchas de agua fría o incluso bañarse en hielos, es un ritual de belleza muy extendido para combatir la celulitis. La explicación científica es que al descender la temperatura corporal el organismo necesita más energía y la consigue quemando depósitos de grasa. Además, puede tener otros beneficios añadidos como activar el sistema nervioso y tonificar la piel.
3. Incluir proteínas en el desayuno
Los nutricionistas recomiendan tomar un desayuno completo que incluya hidratos de carbono, grasas saludables y proteínas. Estas últimas mantienen saciada durante más tiempo, evitando el picoteo incesante que puede acompañar a una mañana sin desayunar. Según un estudio del Centro de Investigación Biomédica Pennington en Louisiana, si esa fuente de proteínas es un huevo (hervido o cocido), ese efecto saciante se potenciará.
4. Tomar grasas saludables
Las grasas comenzaron a asumirse como imprescindibles en cualquier régimen. Las más beneficiosas para la salud son las insaturadas, poliinsaturadas (omega 3 y omega 6) y monoinsaturadas (como el aceite de oliva o la que aporta la palta). Los alimentos de estos grupos deben aportar como mínimo el 10% de las calorías diarias. Las grasas saturadas (de la carne, los lácteos o la manteca) deberían sumar menos del 10% de la energía, mientras que las grasas trans deben reducirse hasta menos del 3%).
5. Comer alimentos ricos en fibra
Según un estudio de la Universidad de Massachusetts publicado en Annals of Internal Medicine, consumir 30 gramos de fibra por día ayuda a perder peso, además de beneficiar a la salud cardiovascular. Las espinacas, el brócoli, las lentejas, los cereales integrales o la manzana son algunos de los alimentos con mayor contenido en fibra que no pueden faltar en una alimentación equilibrada.
6. Beber té verde
Hace décadas que se demostró que la cafeína acelera el metabolismo. En1980 un estudio probó que esta sustancia excitante presente en el café potencia el consumo de calorías por parte del organismo. Un buen sustituto es el té verde.Según el Departamento de Biología Humana de la Universidad de Maastricht, en los Países Bajos, la infusión acelera el proceso metabólico.
7. Oler chocolate negro
Se demostró que comer o incluso solo oler chocolate muy oscuro, con 85% de cacao, puede ayudar a controlar los antojos. Y evitarlos tiene un beneficio indirecto: adelgazar será más fácil.
8. Cenar temprano
Un equipo del Centro de Investigación Biomédica de Pennington evidenció que concentrar la dieta diaria en un horario de 8 de la mañana a 2 de la tarde eleva el consumo de grasa durante la noche, además de regular el apetito y el metabolismo.