Durante los últimos años, se han descubierto numerosas propiedades de algunos alimentos, que, de consumirse de manera regular, puede ayudar a mejorar distintas funciones del cuerpo humano.
Entre ellos, se encuentra el vino tinto, que, de beberse siempre con moderación, puede traer beneficios para la salud de las personas, como mejorar las funciones cognitivas o limpiar el paladar de bacterias.
Combate las grasas: el consumo de esta bebida activa la función de un gen que impide la formación de nuevas células de grasa y ayuda a movilizar las existentes, según investigaciones el MIT.
Mejoras las funciones cognitivas: para algunos científicos, el consumo moderado de vino tinto mejora el funcionamiento del cerebro. Creen que se debe a que la elevada presencia de antioxidantes en su composición reduce la inflamación.
Mata bacterias bucales: algunos compuestos presentes en esta bebida frenan el crecimiento bucal de los estreptococos y bacterias vinculadas a las caries, además del de otros asociados a la gingivitis y dolores de garganta, según investigadores italianos.
Ejercicio líquido: una investigación publicada en la revista The FASEB Journal, sugiere que el resveratrol de la uva disminuye las consecuencias negativas de la vida sedentaria.
Cuida la próstata: consumir siete vasos de vino tinto semanales después de cumplir los 40 años de edad, reduce en más de la mitad los diagnósticos de cáncer de próstata, asegura un estudio sobre el vino tinto.