El olor de los hombres puede hacer que las mujeres beban más alcohol de lo habitual. Así lo asegura un estudio realizado por investigadores del Departamento de Psicología de la Universidad del Sur de Florida, en Estados Unidos, que exploraron cómo el olor de un hombre puede afectar la decisión de una mujer de beber después de realizar un experimento similar en hombres.
En la investigación previa, los especialistas demostraron cómo los olores emitidos por las mujeres que estaban en la fase fértil del ciclo menstrual llevaron a los hombres a beber una mayor cantidad de alcohol.
Dedujimos que la detección de los olores sexuales masculinos puede instigar el consumo de alcohol debido a la asociación cultural de larga data entre el consumo de alcohol y el sexo
Esta vez, los investigadores utilizaron 103 mujeres de entre 21 y 31 años para determinar si lo mismo podría decirse en el sentido contrario. Las participantes creían que estaban participando en una encuesta sobre consumo de colonia y bebidas masculinas. Les presentaron fragancias que habían sido rociadas con androstenona, una feromona que se encuentra en la saliva de jabalí, o agua corriente. Luego les dieron dos vasos de 350 ml. de cerveza sin alcohol a cada una.
Las mujeres que habían estado expuestas al aroma de la androstenona bebieron más que las que no lo había hecho(aproximadamente una décima parte de un vaso de cerveza de 350 ml. en el transcurso de 10 minutos).
“Dedujimos que la detección de los olores sexuales masculinos puede instigar el consumo de alcohol debido a la asociación cultural de larga data entre el consumo de alcohol y el sexo”, asegura el estudio.
Si bien los investigadores admiten que los resultados del laboratorio pueden no necesariamente amoldarse con las circunstancias de la vida real, los dos estudios han mostrado cómo el aroma puede influir en la cantidad de alcohol que beben hombres y mujeres.
Los hábitos de consumo de hombres y mujeres han cambiado considerablemente en el último siglo. Un informe reciente publicado en la revista médica BMJ Open describe cómo los hombres a menudo bebían el doble que las mujeres a principios del siglo XX. Sin embargo, las mujeres comenzaron a ponerse al día, y los hombres nacidos a partir de la década de 1980 “sólo” toman un 1,1 más alcohol que las mujeres.