Libertad de Sunchales decidió tomar la decisión de vender su plaza para comenzar un proceso de reestructuración deportiva, fundamentalmente con la intención de saldar viejas deudas desde el plano económico.
Salió tarde al mercado y resolvió apostar a los juveniles del club, por eso fue el único equipo de la Liga Argentina que no utilizó las tres fichas U23 que disponía el reglamento. Contrató nacionales de calidad, un extranjero rendidor y a Sebastián Saborido con la misión de conducir un elenco que se convirtió en el primer finalista de Conferencia, en este caso por el Norte, al dejar en el camino a Oberá TC.
El DT habló en Marca Personal por Sol 91.5 (martes, miércoles y jueves de 20.30) y en el inicio expresó que “estamos muy contentos, con la posibilidad de cerrar la serie y meternos en la final de Conferencia, superando los objetivos que a priori nos habíamos propuesto, disfrutando de este momento y preparándonos para lo que sigue”.
Al momento de analizar el nivel de juego de la divisional, el estratega reconoció que “fue una zona muy pareja donde durante todo el torneo se dieron resultados raros, en cualquier cancha el que iba colista le pudo ganar a los punteros, nuestro objetivo primordial no era estar en este lugar, el equipo se armó con todo el movimiento político del club a último momento, apostando a contratar fichas mayores importantes porque no íbamos a contar con las fichas U23, se apostaba por los juveniles del club, salió bastante bien, y después fuimos trabajando el torneo, fuimos creciendo a la par del torneo, los candidatos a priori que podía ver eran Hindú, Barrio Parque, a principio de temporada Unión por la estructura y el equipo lo mismo que San Isidro“.
Y más adelante, enfatizó: “Aparecieron las sorpresas como Oberá y Norte que superaron las expectativas, Libertad dentro de mi consideración fue una sorpresa, en el caso de Barovero, había muchas apuestas y me parece obviamente estamos orgullosos del trabajo, contentos, conformes y disfrutando este momento”.
Desde que los Tigres lo fueron a buscar, está claro que con todo un cuerpo técnico que pudo conformar, Saborido ejecutó un trabajo que está llevando a los sunchalenses a la parte final de la competencia. En este sentido, el ex-DT de Alma Juniors reconoció que “tuve muchísima libertad para armar el equipo, me dejaron elegir a los jugadores y al saber que íbamos a contar con Barovero lo primero en las reuniones iniciales era armar un equipo alrededor de él, tener un jugador así ameritaba un armado particular, que se sintiera cómodo, un poco el equipo supo aceptar cada uno sus roles, cada uno sabe cual es su rol, lo acepta y trata de ejecutarlo de la mejor manera, tuvimos altibajos y encontramos esa regularidad que no lograron equipos que a priori parecían con mucho más potencial, los más regulares fueron Libertad e Hindú, Barrio Parque por momentos parecía que se caía pero su jerarquía lo puso ahora peleando por llegar a la final”.
Antes de su despedida, a días de jugar la semifinal nacional para determinar el campeón del Norte, el conductor liberteño opinó que “siempre desde que empezó la temporada nos pusimos objetivos cortos, el primero era ser competitivo y representar a Libertad de la mejor manera, después el equipo empezó a funcionar, nos pusimos después tratar de estar en el Súper 4, trabajamos para eso, se dio, llegó la semi y pasamos a la final que pudimos ganar, el Súper 4 hizo creer en el potencial del equipo“.
Para luego, agregar: “Después la idea era estar entre los cuatro del Norte, luego pensamos en ser los mejores, dijimos estamos a dos partidos del uno, lo intentamos y se dio, hoy el objetivo es afrontar el próximo playoffs como lo hicimos con Indendiente y ahora con Oberá. Todos tenemos ganas de soñar y nos permitimos el sueño pero no nos podemos apurar”.