Botella, damajuana, tetra brik... y ahora también, en lata y barril. Desde hoy, las bodegas argentina van a poder comercializar sus bebidas en envases de acero inoxidable y aluminio.
Esto significa que ahora el vino se puede vender en tanques, garrafas o latas de hasta 50 litros, dándole la posibilidad a esta bebida de competir directamente con la cerveza.
Así lo confirmó José Zuccardi, presidente de la Unión Vitivinícola Argentina y dueño de las Bodegas Zuccardi y Santa Julio, en diálogo con El Cuarto Poder. "Se busca darle al vino mayor flexibilidad en sus esquemas de envase para poder competir con otras bebidas como la cerveza", explicó.
Además, Zucardi expresó que estos cambios de envase no van a afectar la calidad del vino: "Se usa en muchos países y hay buenos antecedentes". "Al no tener contacto con el oxígeno por estar envasado en lata, la bebida va a seguir su proceso de evolución", destacó sobre este producto "totalmente natural".
Repercusiones
En general, las repercusiones frente a esta medida, son positivas. Desde la Cámara de Bodegueros de San Juan, por ejemplo, señalaron que puede ser una excelente alternativa para competir en el mercado y dejar de lado los prejuicios de que el vino"sólo se debe beber en copa".
En tanto que desde Bodegas de Argentina señalaron que esta medida amplía las posibilidades para la industria:"Si uno quiere una cerveza podés elegir, entre una botella chica o grande, una lata de 350 cc o de 500 cc, es decir, hay mucha diversidad de envases. En nuestro caso el vino no tiene versatilidad".
Cabe destacar que en los últimos 20 años creció significativamente el consumo de cerveza: a fines de la década del 90 se consumían 40 litros per cápita de vino contra 37 litros de cerveza.
Sin embargo, esa relación cambió sustancialmente: el año pasado, el consumo anual per cápita de vino bajó a 20 litros y el de la cerveza pasó a más que duplicarlo, con 42 litros.