Jorge Pizarro, una de las caras más conocidas de los noticieros, fue suspendido de El Nueve mientras las autoridades de la emisora estudian las denuncias por maltrato que realizaron compañeros del periodista.
El periodista fue acusado por sus compañeros por "maltratar, denigrar y humillar a los trabajadores del canal" y pidieron a las autoridades que se tomaran medidas contra él.
"De parte de la redacción del noticiero y los sectores que componen la producción del mismo, solicitamos tengan a bien evaluar una medida contra el señor Jorge Pizarro por su conducta para con el resto de sus compañeros", arranca el comunicado enviado al departamento de Recursos Humanos del canal.
Y sigue: "Maltratos, humillaciones y denigrar a quienes trabajamos con él se ha vuelto moneda corriente. Lejos de aplacar su comportamiento, los episodios se han tornado cada vez más violentos y se ha naturalizado que nos grite e insulte a diario. Se ha convertido en una persona tan difícil de tratar que incluso compañeras que rompen en llanto asiduamente por su comportamiento, tienen miedo de denunciarlo por lo que esto pueda traer aparejado".
En el escrito, además, afirman que "la prepotencia, la descalificación y la misoginia como instrumento cotidiano de trabajo hace que sea insostenible seguir compartiendo un espacio laboral con él", y señalan que el reclamo nace "a partir de un hecho donde transgredió todos los códigos de buena conducta al agredir físicamente a un compañero".
Fuentes del canal dijeron a Exitoína que "Pizarro se cruzó con un productor en un control y casi se fueron a las manos". El violento episodio detonó la furia y desencadenó una lluvia de denuncias de compañeros y otras personas del canal contra el periodista. "El canal abrió un sumario interno y lo suspendieron hasta que se resuelva este sumario", aseguraron.
Alguien que conoce mucho los pasillos de El Nueve asegura que el periodista va directo a que lo echen.
El escándalo no es nuevo para el periodista, ya que en 2011 fue desvinculado de la gerencia de prensa del Canal 9 de Paraguay, luego de una polémica gestión de varios meses, en que se lo acusa de maltratar empleados, prohibir el uso del guaraní, e incluso provocar la internación de un periodista, que sufrió un pico de presión al discutir con él.