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No caben dudas que Richard "Chengue" Morales dejó impresa su huella en el fútbol uruguayo tanto en su pasaje por Nacional como en la selección uruguaya.

Líder, temperamental y dueño de una personalidad especial, el famoso "Chengue" dejó anécdotas de todo tipo en su etapa como futbolista.

Varias de ellas las contó en una extensa entrevista con Radio Sport donde reveló hechos increíbles y destapó la olla.

Morales expresó en primer lugar que actualmente se encuentra desocupado debido a que dio un paso al costado en su relación como ayudante técnico de Paolo Montero, con quien dirigió en Boca Unidos, Colón de Santa Fe y Rosario Central.

"Con Paolo decidí dar un paso al costado por todo lo que requiere ser entrenador, que es más difícil que jugar al fútbol", contó el "Chengue", quien reveló que ser técnico "se le dedica más horas y más tiempo de trabajo que siendo futbolista".

A su vez, reveló que en un futuro no quiere dirigir "porque la felicidad de una persona no pasa por un resultado deportivo. Nosotros, los jugadores y los técnicos, estamos dependiendo 100% de eso y no es lo que yo quiero para mi vida", admitió.

Tras su desvinculación con Montero y de su cargo de ayudante técnico, reveló que le gustaría ser representante de futbolistas. "La idea es armar un equipo de trabajo para representar porque los tiempos los pondría yo mismo", expresó.

El famoso partido con Senegal

El tercer partido por la fase de grupos en el Mundial de Corea-Japón 2002 ante Senegal, que terminó 3-3 después de que Uruguay fuera perdiendo 0-3 al término del primer tiempo, dejó mucha tela para cortar.

Mucho se ha hablado de lo sucedido en ese partido y los rumores de lo que pasó en el vestuario de los africanos en el descanso fueron interminables.

Sin embargo, el principal actor de aquella "corajeada" en el vestuario rival fue el propio "Chengue" Morales, que no se calló y contó lo sucedido.

"Cuándo terminó el primer tiempo e íbamos perdiendo por goleada, Darío (Rodríguez) me dijo: 'algo tenemos que hacer Chengue".

"Fuimos al vestuario de ellos pero cuando llegamos a la puerta nos encontramos con dos seguridad que eran gigantes. Imagínate, así como entramos salimos de nuevo", contó Morales.

"Cuando volvimos al vestuario nuestro les dijimos al oído a nuestros compañeros que los habíamos presionado y que había que salir a ganar. En realidad, fue todo al revés", reveló.

La mentira del "Chengue" y Darío pareciera que tuvo efecto porque Uruguay convirtió tres goles y terminó empatando el partido. Incluso, estuvo a nada de marcar el cuarto con aquel famoso cabezazo del propio Morales que se fue apenas afuera del vertical y la imagen del entrenador Victor Púa emulando la jugada.

"Por suerte tomó resultado esa mentira que dijimos porque cambió la actitud de los nuestros y pudimos revertir el partido, aunque no alcanzó", sostuvo el "Chengue".

El clásico del 2008 y compañeros que "no se jugaron las piernas"

Nacional perdió 2-0 ante Peñarol aquel año pero el clásico fue recordado por la camiseta que el propio "Chengue" terminó tirando a la tribuna después de ser expulsado.

Morales reveló algunos hechos de aquel partido y se desahogó: "Me arrepiento por lo de la camiseta por el acto público que después se tomó y por los hinchas tricolores que se confundieron".

"No tiré la camiseta porque era la de Nacional. En ese partido traía muchas cosas acumuladas y exploté", dijo Morales, quien admitió que "habían tres o cuatro jugadores que ya estaban vendidos a otros clubes y por pedido de sus representantes no querían jugar ese clásico".

"Los representantes les dijeron que no jugaran para no arriesgar y por supuesto no compartí esa decisión. Les dije que hablen con el técnico, que tampoco lo hicieron", sostuvo Morales, quien reveló: "Nadie se enteró pero en el partido ninguno de ellos se jugó las piernas".

Morales no escondió su impotencia en aquel partido, y dijo: "Jugar un clásico es de las cosas más lindas y tres jugadores que no lo querían jugar me indignó".

"Lo de la camiseta fue pura impotencia; me lo tragué solo. La tiré porque exploté de calentura", enfatizó.

Relación con Lugano y "Más Unidos Que Nunca"

“Mi relación con Lugano es mala por no tener una relación de diálogo y más sabiendo que hay jugadores en la C que tienen muchas necesidades", admitió Morales.

"Lugano vendió que estaban alineados hasta los jugadores de la C. En su momento salieron con la pancarta y ahora están arrepentidos. Por lo que vendieron y le hicieron creer a la gente todos los jugadores están alineados con el movimiento "Más Unidos Que Nunca", expresó.

"A mí me rechazaron la entrada en AUF porque yo estaba con los jugadores de la C. Se portaron muy mal con ellos porque en aquel momento se estaba cocinando el Ejecutivo y que los jugadores de la C votaran iba a tener un cambio importante para determinar quién iba a ser el presidente", concluyó el "Chengue".