La pareja que conformaron Cecilia Roth y Fito Páez fue emblemática. Tanto, que el álbum más famoso que catapultó al rosarino al éxito, El amor después del amor, está inspirado en ella y repleto de referencias a su historia, que comenzó cuando se conocieron en 1991.
Fue verse y engancharse: ella estaba casada, ya era una “chica Almodóvar” y una actriz de gran prestigio en España; y él, a sus 28 años, sucumbió. Pronto empezaron a salir, luego adoptaron a su hijo Martín (20), se casaron en 1999 y en 2002 se separaron en muy buenos términos.
Tan buena relación supieron conservar que el lazo aún se mantiene fuerte, tal como Cecilia reconoció en diálogo con Juan Etchegoyen en Mitre Live, una charla en la que se abrió por completo y expresó sus sentimientos.
“Nunca dejé de amar a Fito. Lo amaba como pareja y ahora lo amo como amigo, como hermano”, dijo Roth. Y señaló lo importante que es para su hijo que los dos se lleven bien y tiren para el mismo lado. Aunque admitió: “Nos costó el reencuentro desde otro vínculo, aunque nunca te hayas dejado de querer”.
Cecilia destacó que esta buena sintonía entre los dos “tranquiliza y pone fuerte a Martín". “Le hace creer en el amor también, y en que es posible después de una separación reencontrarse en las mejores cosas de cada uno y no tener por qué soportar las otras”, agregó. A la hora de sincerarse, la artista fue directa: “Yo creo que Fito fue el gran amor de mi vida, hasta ahora por lo menos”.
En cuarentena con su hijo y la novia de él, Emilia, Cecilia comentó que la última vez que estuvo con gente fue, de hecho, en el cumpeaños de Fito, el 13 de marzo. “El 18 dije 'yo no salgo más'”, aseguró.
Por ahora, la convivencia con los jóvenes “es genial”. “Martín está divino. A pesar de que vive acá prácticamente, con la cuarentena es una convivencia mayor. Hay espacio por suerte en la casa. Me encanta ver cómo convive una pareja tan joven. Me produce curiosidad y mucho amor", aseguró.