Federico Lértora llegó en el mercado de pases del invierno del 2019 por pedido expreso de Pablo Lavallén. Los dirigentes hicieron un gran esfuerzo económico para contratarlo, debido a que en el medio apareció Newell's con la misma ambición por contratarlo.
Lértora fue muy importante en la primera mitad de la temporada, pero en la segunda no pudo retomar su nivel y perdió su lugar en el equipo titular más allá que el entrenador en gran parte fue Diego Osella, quien lo conocía tras haber coincidido en Belgrano de Córdoba.
El volante central habló con TNT Sports donde hizo un repaso de su estadía en el Sabalero, en cuanto al hecho de haber jugado la final de la Sudamericana, el bajón que los dejó en zona de descenso y la merma en su rendimiento, más allá que se ilusionó con el regreso de Eduardo Domínguez a la conducción técnica del equipo.
En el inicio de la charla se le preguntó por cómo se viene trabajando en cuarentena, y Lértora admitió: "Se está haciendo bastante larga la espera, venía bastante bien. Crece la incertidumbre, no hay fecha de finalización ni arranque de lo nuevo, la veníamos llevando bastante bien. Pero esto es lo que nos toca, por lo cual hay que esperar y cuidarse. Genera ansiedad. Hay que tratar de ver la realidad, el fútbol. Es un tema de salud, es mundial, con lo cual hay que abocarse a que la sociedad esté bien. Quiero jugar y volver a entrenar pero hay que conformarse con entrenar en casa".
En cuanto a cómo es la relación con Eduardo Domínguez, indicó: "Nos hemos conocido no de manera personal, como sería habitual, y sí vía online. En mi caso, que no lo conocía, hemos aprovechado, aunque no es lo mismo el día a día y estar en el vestuario, pero hemos logrado suplirlo. Es la primera vez que lo tengo, hay chicos que lo conocen. Los que no lo conocemos hemos tenido charlas con él vía Zoom, como todo el mundo ahora".
Luego hizo un balance de su temporada en Colón y admitió: "Me costó el final del año pasado ya que había llegado a Colón sin pretemporada debido a las negociaciones y el traspaso. Llegué y me puse a jugar por lo cual me faltó pretemporada para llegar con resto. En tanto que a principio de año tuve algunas cuestiones familiares que me afectaron en lo emocional y eso repercutió en el rendimiento. No me sentía a gusto conmigo, estaba mal y no me desempeñaba de la manera en que lo puedo hacer. Cuando llegó Eduardo el ánimo fue otro, ahora me siento bien, espero poder ponerme a tono con todos mis compañeros y poder recuperar el nivel"..
Y agregó: "Fue de mayor a menor. Ahora espero poder retomar mi nivel ya que fueron cuatro meses muy intensos. Vivimos muchas cosas con la Copa Sudamericana, quedamos afuera de la Copa Argentina en cuartos de final y la verdad que fue un primer semestre muy bueno. La segunda parte arrancó complicada y difícil tanto en lo personal como en el equipo y cuando parecía que empezábamos a remontar, se cortó todo. Espero que este parate sirva para poder arrancar bien y retomar ese envión".