La decisión de Jimena Barón de mudarse a la casa de su ex, Daniel Osvaldo, junto a su hijo Morrison en cuarentena fue súper comentada (y criticada).
La sorpresiva mudanza no tardó en generar rumores de reconciliación de los ex e incluso se especuló con que Barón podría estar buscando otro hijo con la actriz
Molesta, Jimena desmintió la reconciliación y contó que se fue de la casa de Daniel: “No estoy embarazada. No volví con nadie. Volví a mi casa porque estoy con un tratamiento en el hombro que me lo lastimé, ayer me lo pincharon y tengo que volver para que me lo pinchen. Está todo bien”.
Y cerró contundente sobre la buena relación que mantiene hoy con Osvaldo después de su polémica separación: “Re aburrido que esté todo bien, pero está todo bien”.
"Siempre que el papá de mi hijo me dé lugar y muestre predisposición, voy a estar con una sonrisa enorme (y un vino). Viví toda mi vida con papás que se llevaron como el culo y duele. Haré siempre todo lo posible para regalarle otro capítulo de papás a mi hijo. Pasar página no significa perderse, ni olvidar, ni dejar de tener las cosas claras. Significa remendar, sanar. Todo lo que sea sanar y sentirse mejor será bienvenido, decisión 2020. Y eso para mí es un regalo que también me hago a mí misma, porque todos merecemos sentirnos mejor con la fórmula que nos haga más felices", sostuvo Jimena en una parte del contundente descargo que compartió en Instagram Stories, echando por tierra la reconciliación, pero apostando a la familia.