Este miércoles se cumplen 25 años del gran triunfo de Colón frente a San Martín de Tucumán, en el Jardín de la República, con el gol de Adrián Marini, donde se dio un gran paso para volver a Primera División tras 14 temporadas en la segunda categoría del fútbol argentino.
Chupete Marini habló con Diez en Deportes por LT10 (AM 1020) sobre aquella tarde, pero sobre todo haciendo hincapié en cómo se pudo reponer de un accidente donde le quedó muy dañado uno de sus tobillos. Sobre esa situación, manifestó: "Es emocionante como lo relataste (dijo sobre la introducción a la nota que hizo Fabián Mazzi), fue muy difícil realizar una rehabilitación tan rápida. Hacía una fecha que había comenzado el campeonato, gracias a la fe, al acompañamiento de mi familia y de la gente fue que tuve mucha fuerza para salir adelante. También gracias a Dios que me puso en ese camino y encontrarme con ese gol".
En cuanto al gol, dijo: "Fue inolvidable, no tengo palabras para describirlo, querés abrazar a todo el mundo. Lo primero que hice fue salir corriendo hacia la hinchada, subí al alambrado, bajé, fui para el otro lado, quería estar con todos. Esa emoción que querés hacer todo en un segundo, fue gratificante sentir eso y verlos a mis compañeros llorar, abrazarnos, fue inolvidable".
En otro tramo de la charla, afirmó: "Siempre cuando llega esta fecha a uno lo llena de placer y orgullo, es como que fue ayer lo que sucedió. Estábamos muy confiados para la revancha, creíamos que ese resultado en Tucumán nos favorecía un montón, sabíamos que eran muy duros, más de local donde ganaban siempre. Pero ese triunfo nos dio mucha confianza, ya nos sentíamos campeones. Teníamos un plantel bárbaro, con jugadores de experiencia que nos sabían llevar a los más jóvenes. Sabíamos que también podíamos ganarlo de local".
"Era un gran plantel, los jugadores que alternaban también marcaban la diferencia. Si salía uno e ingresaba otro era lo mismo. La defensa era muy difícil que le hagan goles, en la mitad de la cancha se jugaba muy bien, mientras que arriba teníamos un gran poderío, sabíamos que en cualquier momento podríamos convertir un gol", agregó en otra parte de la charla.
En cuanto al gol, destacó: "Recibí la pelota del Negro Ibarra, el lateral izquierdo va a cerrar, me acomodé adentro del área, veo que me cierra Eduardo Magnín, y lo primero que atiné fue a mirar al segundo palo y pegarle fuerte, la pelota se fue elevando y se clavó en el ángulo. En ningún momento pensé en desbordar y tirar el centro, como me vi tan solo y me acomodé tan bien, le pegué fuerte".
"A esa camiseta la tiene mi mamá, yo se la firmé, la tiene guardada. El otro día fui a sacarme un par de fotos, ella la tiene guardad y en el corazón. Las camisetas que guardé fueron tres o cuatro, las dos con las que le hice el gol a Unión, la del gol a San Martín de Tucumán. Pero soy de dar mucho, las regalo, si me la vienen a pedir las doy. Cambién camisetas con rivales, pero las mías la mayoría fueron regaladas. Sí también tengo las que usé con la Selección, la N° 18 y 11, que utilicé en Mar del Plata y en un amistoso en Colombia", finalizó Chupete Marini.