Vecinos del Parque Garay y Pro Adelanto Barranquitas se quedaron sin gas al sufrir el robo de los flexibles de cobre de las casillas.
El domingo a la mañana se dieron cuenta que no podían prender las hornallas y salieron para ver qué pasaba. La razón era que se habían robado los flexibles de cobre de las casillas de gas.
Lo curioso e indignante de la situación es que llamaron a Litoral Gas para hacer el reclamo y cuando trabajadores de la empresa se acercaron al lugar retiraron los medidores y les pusieron un “cepo”.
“Estábamos indignados porque el reclamo era de hurto y Litoral Gas nos puso un cepo”, señaló una de las vecinas damnificadas al móvil de LT10.
La medida tomada por la empresa implica que cada usuario debe llamar a un gasista para que les haga refacciones y poder volver a conectar el servicio. Y esto tiene un costo que deben afrontar los usuarios: “Nos robaron y encima tenemos que poner de nuestro bolsillo para hacer la instalación que corresponde”.
Son unas 15 familias del Parque Garay y unas 12 de Pro Adelanto Barranquitas que quedaron sin gas y con costos que deben afrontar por culpa de los delincuentes que robaron los caños.
Aunque, también esperan que las autoridades respondan y les solucionen este gran inconveniente y gasto que les deja la falta de seguridad en la zona.