A la hora de limpiar el baño, es común cometer algunos fallos en la limpieza. Para que los resultados sean lo más satisfactorios posibles, es importante evitarlos. Estos son algunos de los que no te permiten que quede una correcta higiene y sin rastros de suciedad.
1. Descuidar la humedad
Uno de los fallos más frecuentes es no darle a este espacio la suficiente ventilación después de ducharnos. Es importante encender el extractor de aire justo antes de entrar en la ducha para ventilar, evitar la aparición de moho y eliminar la humedad. Si no tenés, abrí un poco la ventana. No cuidar la humedad supondría no eliminar los malos olores. Para evitar que la humedad se acumule en los rincones, podés usar una escobilla de goma después de la ducha. De esta forma, te asegurarás de que los azulejos estarán libres de la aparición de moho.
2. Emplear un único producto para limpiar
Cada área concreta precisa de un producto específico para su limpieza. Por ejemplo, la bañera y los azulejos se quedan mucho más limpios con un producto anti-cal en aerosol, y para limpiar los cristales y mamparas es mejor emplear un limpiador de cristales, incluso, un poco de agua con vinagre blanco o amoniaco entre otros. En el caso del inodoro, es recomendable emplear un limpiador potente para eliminar toda la suciedad, como por ejemplo la lejía, el amoniaco o cualquier otro producto de limpieza específico.
3. Colocar de nuevo la escobilla del inodoro en el soporte
Si acabás de limpiar el inodoro usando la escobilla, es probable que vuelvas a colocarla en el soporte inmediatamente después de limpiar. Al contener agua y humedad, en el soporte estás creando un caldo de cultivo propicio para la proliferación de todo tipo de bacterias. La mejor opción es que la coloques atravesada en el asiento del mismo para que gotee todo el agua ahí dentro. Cuando esté completamente seca, volvé a colocarla en el soporte.
4. No lavar la cortina de la ducha
Ésta suele acumular una importante cantidad de residuos, sobre todo en la parte baja, al estar en contacto directo con el agua y el jabón cada vez que nos bañamos, dando lugar a la aparición de manchas de moho. Por ello, debés lavarla cada tanto, siempre con agua caliente y en un programa para ropa delicada en el lavarropas.