Una empresa cibernética descubrió una falla en WhatsApp e informó a la empresa que el error dejaba expuestos datos delicados de los usuarios, lo que perjudicaba su seguridad personal. De esta manera, los ciberdelincuentes podían robar información de la memoria de la app de mensajería si descubrían el defecto.
El origen de la falla técnica estaba en la funcionalidad de filtro para aplicar en las imágenes, para verla con mayor nitidez o incluso aplicar un efecto de desenfoque. Así, se modifican los píxeles de la fotografía original para aplicar las características correspondientes según la elección del usuario.
La empresa que detectó el disperfecto fue Check Point Research, dedicada a la ciberseguridad, y encontró que el origen se encontraba en la creacion de un archivo GIF por parte del usuario. Es entonces que el cambio de filtros en el archivo generaba fallas en WhatsApp y uno de esos bloqueos afectaba a la memoria de la aplicación de mensajes.
En este caso, el error de seguridad fue denominado CVE-2020-1910 y ya fue solucionado por la app. El ciberdelincuente que quisiera robar información delicada de los usuarios, debía enviar dicho archivo GIF con alguno de los filtros que presentaban las fallas técnicas.