Tras la derrota en Paraguay ante Cerro Porteño por la 2ª fecha del grupo G de la Copa Libertadores, Colón volvió a Santa Fe y por la tarde trabaja para ir por la recuperación ante Independiente el próximo sábado, desde las 16.30, por la 10ª fecha. Fue un duro mazazo el 3-1 en Asunción, en una cancha donde nunca pudo ganar (perdió los tres partidos que jugó) y pese a arrancar ganando.
Pero no hay demasiado tiempo para lamentos y ahora la cabeza está en tratar de reencontrarse con el triunfo después de cinco partidos el fin de semana ante el Rojo. En estos días será importante constatar la evolución de Facundo Garcés, que terminó el último cotejo con un traumatismo en uno de sus tobillos, aunque no sería algo grave.
El rendimiento en general, sobre todo el defensivo, dejó muchas dudas y por eso, no sería raro que el DT Julio Falcioni cambie para encontrar otro tipo de respuestas. El tema coyuntural es que, si todavía se quiere tener aspiraciones en la Copa de la Liga, se debe ganar, porque hoy está fuera de los clasificados.
La rotación la comenzó ante Rosario Central, con el que se obtuvo un buen empate, pero el saldo negativo quedó con titulares en Asunción. La situación ya demandaría cambios, porque al equipo le cuesta mucho marcar y, a su vez, pocas veces cierra su arco.
Todos factores que influyen en este presente. Habrá solo tres prácticas antes de quedar concentrado, en este caso en el Hotel Ate y no en el Intertower, como se venía dando, para esperar el duelo ante el Rojo de Eduardo Domínguez.