"Estamos preparados para hacer frente a todas las posibilidades", declaró Yasser Al-Misehal, expresidente de Federación de Fútbol de Arabia Saudita, durante la entrega de premios de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC), en Qatar, según consignó la agencia de noticias AFP.
Uno de los motivos de mayor preocupación, en especial para el fútbol de Europa, es la fecha en que se jugará la Copa del Mundo ya que la de Qatar, ganada por Argentina, tuvo lugar entre noviembre y diciembre, por el intenso calor que impera en junio y julio, lo que generó complicaciones en el calendario de los torneos y las copas europeas.
Sin embargo, Al-Misehal aseguró: "Existen numerosas novedades tecnológicas que permiten refrigerar o añadir climatizadores en los estadios, sin contar con que muchas ciudades del reino disfrutan de una atmósfera muy agradable en verano".
Las temperaturas pueden alcanzar los 50 grados durante el verano boreal en la región del Golfo, una de las más cálidas del mundo, pero los árabes confían en la tecnología y ofrecen jugar la Copa del Mundo entre junio y julio.