Sacerdote detenido por el abuso sexual de una niña en Reconquista
Se trata de Néstor Monzón, de 47 años. Es el párroco de la iglesia María Madre de Dios. Su víctima es una nena y se investiga si también fue abusado su primo. La niña fue contagiada con una enfermedad de transmisión sexual. Arancedo exigió "tolerancia cero".
El fiscal Rubén Martínez ordenó la detención e incomunicación del sacerdote Néstor Monzón, de 47 años, que cumple funciones y reside en la parroquia María Madre de Dios de la ciudad de Reconquista, lugar en el que habrían sido cometidos delitos contra la integridad sexual en perjuicio de una niña de tres años y presuntamente de su primo, de cuatro.
La denuncia fue realizada por la madre de la niña en el Centro de Orientación de Víctimas de Violencia Familiar y Sexual de la Unidad Regional 19 de la policía provincial.
En diálogo con el programa Al derecho y al revés de LT10, el fiscal Rubén Martínez detalló las situaciones de la que la menor fue víctima: "La nena se lo comenta a la madre, quien a su vez consulta con una psicóloga. La profesional, le da un librito que se usa para estos casos y le muestra la foto de un pene, y ella dice 'es el pito del Padre Néstor'".
"Ahí la madre se convenció que el relato tenía un atisbo de verdad, hizo la denuncia y ahí comenzó la investigación", indicó Martínez.
El fiscal, también informó que los abusos, según el relato de la menor, se cometían en la casa del cura: "La abuela de la niña vive al lado de la capilla, entonces ella jugaba tanto en el patio de la casa de su abuela como en el de la iglesia".
En cuanto al otro menor, el funcionario aclaró que "la nena contó que cuando sucedían estas cosas ella estaba con el primo. Estamos viendo con el padre la posibilidad que presente la denuncia para poder actuar en consecuencia. De cualquier manera, los hechos que le estamos imputando al sacerdote detenido tienen que ver con la menor".
A través de la intervención de un psicólogo y el médico policial, se realizaron diversos estudios a la menor, a partir de los cuales se confirmó que la niña tiene desgarro parcial de su himen y fue contagiada con el Virus del Papiloma Humano (VPH), una enfermedad de transmisión sexual.
Por su parte, Monseñor Arancedo dijo que había leído la noticia en los medios y manifestó: “La Iglesia está cerca de la víctima, de aquella persona que puede haber padecido un abuso. Ciertamente para la Iglesia el abuso de un menor es algo muy triste”.
En tanto, remarcó que “tolerancia cero para aquellos casos que se puedan comprobar. Si hay un caso comprobado del abuso de un menor la Iglesia debe condenar el hecho”.
Audio: Monseñor Arancedo
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Audio: Rubén Martínez (fiscal)
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