“Cada vez se ha estirado más la edad del jugador, eso es bueno para nosotros. Pero el cuidado es fundamental. Uno hace muchos años viene siendo profesional, sabe lo que tiene que comer, el descanso necesario, se conoce a uno mismo. Pero es cierto que tengo que cuidarme porque cada vez pasan más los años. Pero todo eso ya es un hábito para mí y eso hace que esté tan bien. No he sufrido lesiones graves, que es un punto a favor. Los profes siempre me decían que iba a jugar hasta los 41, 42 años… Porque tengo un físico privilegiado. Hoy disfruto del presente y me siento muy bien. Eso hace que me sienta a la par de los chicos y, mientras sea así, seguiremos. No sé si será hasta esa edad… Recuerdo también un ayudante de Kudelka que siempre me decía: ‘Jugá hasta donde más puedas, no dejés y después quiera volver. Porque el fútbol se va rápido’… Eso lo tomé. Tengo ganas de seguir ganando cosas y estando vigente. El hambre de gloria no se me va. Tengo esa llamita encendida. Disfruto el día a día… Es por ahí la cosa”, supo contar Diego.
“No pienso tanto en los récords, porque tampoco sabía que era el único jugador que había ascendido en todas las categorías del fútbol argentino. Era un dato que no lo supe hasta lograrlo y quedó en la historia. Se dio acá en Racing, gracias a Dios. Pero ahora tenemos que pensar en el presente, disfrutar el día a día. Si se da, bienvenido sea. Sería otro logro muy lindo para mí y mi carrera. Pero trato de mirar el presente y el objetivo del grupo. Vivo el hoy…”.
Diego se inició en Sportivo Las Heras y luego pasaría por Colegiales (Concordia), Patronato, Unión de Santa Fe, Atlético Tucumán, Atlético Venezuela (de Venezuela), Instituto, Central Córdoba de Santiago del Estero, All Boys, Gimnasia (Concepción del Uruguay) y Racing, desde la temporada 2020/21.
Este jueves, buscará seguir haciendo historia grande en el fútbol argentino.