Unión juega en Brasil un partido que vale más que tres puntos
El equipo de Madelón se despide de la Sudamericana ante Cruzeiro, pero el encuentro puede marcar el inicio de una nueva etapa: la depuración del plantel. El DT definirá con este partido quiénes seguirán en el próximo semestre.
Aunque no hay nada en juego en términos de clasificación, el partido que Unión disputará este miércoles ante Cruzeiro en Belo Horizonte será mucho más que un simple cierre de fase de grupos de la Copa Sudamericana.
Para Leonardo Madelón, se trata de una última gran prueba para decidir quiénes están a la altura del próximo ciclo, ya que Unión en la segunda parte del año se jugará su permanencia en Primera División.
Sin chances de avanzar a octavos, el Tatengue necesita ganar por varias razones: evitar el último puesto en el Grupo E, sumar los 115.000 dólares que entrega Conmebol por victoria, y —fundamentalmente— enviar una señal de carácter y compromiso ante un rival histórico, aunque también eliminado.
Pero el foco del cuerpo técnico está más allá del resultado. En los pasillos del club ya se habla de una importante depuración del plantel, con jugadores que podrían salir en las próximas semanas y refuerzos que llegarían para cambiarle la cara a un equipo que quedó en deuda a nivel internacional.