Con el cierre del libro de pases a la vuelta de la esquina —vence este jueves—, en Unión se viven horas decisivas para terminar de conformar el plantel. Si bien la negociación por Augusto Solari avanza y podría resolverse pronto, el cuerpo técnico encabezado por Leonardo Madelón tiene una prioridad clara: un volante central.

La caída de la negociación por el uruguayo Rodrigo Saravia alteró los planes. El mediocampista de contención era el apuntado para reforzar una zona sensible, pero eligió irse a Belgrano y desde entonces la dirigencia trabaja contrarreloj para encontrar una alternativa.

Por ahora, no trascendió ningún nombre, aunque la búsqueda no se detiene. Madelón considera fundamental sumar un jugador en ese puesto para equilibrar el mediocampo, sobre todo pensando en un torneo corto donde cada partido es clave.

En paralelo, la situación de Augusto Solari sigue en pie. Unión apura gestiones en un mercado que entra en su tramo final. El tiempo corre y Madelón espera por las piezas que faltan para completar el rompecabezas.