La Casa del Brigadier: ejemplo único de la arquitectura poscolonial en la región
El inmueble representa un modelo arquitectónico doméstico de principios del siglo XIX. Al momento de su construcción, fue una verdadera innovación por su diseño fuera de los cánones de las edificaciones coloniales.
La suntuosa pero sobria “Casa del Brigadier” está ubicada en la intersección de 9 de Julio y General López, en el casco histórico de la Ciudad de Santa Fe.
El inmueble fue construido sobre muros de adobe en 1812 por el suegro del caudillo, el protomédico Manuel Rodríguez. Fue habitada por López y su esposa, Josefa, entre 1819 y 1838. En este período, las paredes del hogar fueron testigos de innumerables encuentros con figuras políticas como Rosas, Mansilla y Quiroga.
Cuando Urquiza visitó Santa Fe en 1852, se alojó en este edificio, donde aún se conservaban muebles, objetos y cuadros que pertenecieron al brigadier.
La casa representa un arquitectura común en la Santa Fe poscolonial, pero al momento de construirse, fue una verdadera innovación por su diseño, ya que en ese período predominaban las casas bajas y de techos a dos aguas, típicas de la época colonial.
Este inmueble con paredes altas, patio central y cubierta de azoteas, omite las galerías de tradición española e incorpora interiores más introvertidos. Los muros de la planta baja son de adobe y los de planta alta -ampliaciones posteriores a 1870- son de mampostería de ladrillos.
Por LT10, el arquitecto Luís María Calvo, explicó que “la historia de esta casa tiene algo más de dos siglos (…) de su tipo, es la única que creemos que subsiste. Posee más de diez habitaciones y se diferencia de las casas coloniales. En su interior, se conserva mucho de la carpintería de la época del brigadier”.
Con el tiempo, la casa sufriría modificaciones, con el fin de modernizarla y conservarla. Calvo indicó que “el exterior fue completamente modificado cuando el edificio fue adquirido por Daniel De la Torre. En 1870 se le hace la fachada que hoy conocemos. Le hace una ochava que hasta entonces las casas no las tenían. En la época del Brigadier el frente era muy liso, sin ornamentos”.
En 1942, la “Casa del Brigadier” fue declarada Monumento Histórico Nacional.
Tras el derrumbe que sufrió la casa en 2017 y su posterior puesta en valor, se descubrió que para su edificación se empleó la construcción de tapia, adobe y ladrillos.
En 2021 se inauguraron las obras de refacción y puesta valor, y fue abierta al público como parte del circuito histórico de la ciudad.
Para conocer más la historia de la Casa del Brigadier ingresá al podcast de “Rastro Urbano”: