Unión atraviesa el tramo más irregular de la segunda parte del año, donde el equipo de Leonardo Madelón pasó de ser puntero de la Zona A a mirar de reojo los resultados de la fecha 13, con el riesgo de quedar fuera de los puestos de clasificación a los octavos de final antes de recibir este martes 21 de octubre a las 19.15 a Defensa y Justicia, en el estadio 15 de Abril, con Nazareno Arasa como árbitro.

El principal motivo de la caída futbolística del Tatengue está en su fragilidad defensiva, un aspecto que había sido su sello más confiable en el arranque del semestre. Tomando como referencia los 14 partidos oficiales que disputó desde julio —contando los de Copa Argentina ante Central y River—, el contraste entre la primera y la segunda mitad del período es evidente.

En los primeros siete encuentros, Unión recibió apenas tres goles y mantuvo la valla invicta en cuatro oportunidades, mostrando solidez, orden y compromiso colectivo en la recuperación. Sin embargo, en los últimos siete partidos, el panorama cambió por completo: el equipo recibió 10 goles y solo mantuvo el arco en cero ante Banfield y River, aunque ante el Millonario terminó eliminado por penales en la Copa Argentina.

La caída en el rendimiento individual también explica el declive. Maizon Rodríguez y Valentín Fascendini, que habían mostrado gran seguridad en el arranque, hoy evidencian un bajo nivel, mientras que en la zona media Mauro Pittón y, sobre todo, Mauricio Martínez, perdieron eficacia en la contención y equilibrio táctico.

Unión dejó de ser ese equipo corto, compacto y solidario que había logrado transformar la solidez en puntos. En las últimas fechas, los rivales aprovechan con facilidad los espacios, el retroceso lento y la desconexión entre líneas, factores que le costaron puntos valiosos y pusieron en riesgo su clasificación.

De cara al choque ante Defensa y Justicia, Madelón trabaja para recomponer el funcionamiento defensivo que le dio identidad y resultados. El objetivo es claro: recuperar la seguridad del bloque, volver a ser confiables atrás y sostener las aspiraciones de meterse entre los ocho mejores del Torneo Clausura.