El histórico templo masónico de Santa Fe, ubicado en 9 de Julio 2454, frente a la plaza San Martín y junto al edificio de los Bomberos, volvió a quedar en el centro de la escena tras la aparición de pintadas en su ingreso. Sobre los vidrios de la puerta principal se dibujaron varias cruces realizadas con pintura rosa, lo que generó preocupación entre los integrantes de la institución.

Según confirmaron a LT10, el episodio ocurrió en horas de la madrugada del lunes y las autoridades ya realizaron las denuncias correspondientes para que el hecho sea investigado.

El templo masónico santafesino es una construcción emblemática levantada en 1898, casi una década después del inicio formal de la actividad en la ciudad. Su valor histórico y arquitectónico convierte al edificio en un punto significativo del patrimonio local, motivo por el cual el ataque generó especial malestar.