La Comisión de Acuerdos de la Legislatura debe tratar en la sesión de esta semana el pliego del CPN Oscar Biagioni, enviado por el gobernador Omar Perotti para que continúe integrando el Tribunal de Cuentas de Santa Fe, en el que hasta septiembre fue vocal y anteriormente se desempeñó como presidente. Pero la decisión del mandatario provincial sigue cosechando rechazos, porque sobre el funcionario pesan denuncias por discriminación, hostigamiento, acoso laboral y hasta acoso sexual. 

Este lunes, LT10 consiguió un segundo testimonio contra Biagioni. En exclusiva, una de las mujeres que lo denuncia dialogó con el programa De 10.  

“Vengo con una serie de persecuciones en el año 2017”, recordó, y comentó que tras realizar un reclamo administrativo por un plus que le correspondía, comenzó a sufrir hostigamiento y un brutal trato por parte del por entonces presidente del Tribunal de Cuentas. 

“Yo estaba en una fiesta. (Biagioni) me llama un día las 12 de la noche a través de un amigo, gritándome barbaridades porque no le gustaba el tenor de la nota. Posteriormente, me llama el  14 de febrero de 2017 diciéndome ‘negra de mierda, metete...’, y cosas que no puedo seguir reproduciendo”, relató.

A partir de ese episodio, cuenta la mujer, la persecución y segregación en el ámbito laboral se hicieron cada vez más intensas: la aislaban, no le daban trabajo pese a tener la máxima categoría administrativa, y hasta llegaron a borrar todos sus antecedentes tras 25 años en la repartición, impidiendo así que se presente a concursos. 

En diciembre de 2020, le dieron un expediente de tres cuerpos para que lo vea y dictamine en tres horas. Le exigían que firme un acto de adjudicación de una licitación sin ninguna objeción, “esté dentro del marco normativo o no”. Lo que ella hizo fue un dictamen en potencial. Tras ello, debió tolerar que le hicieran un dictamen complementario, a modo de burla, en el que la acusaban de incumplir sus funciones. 

Fue entonces que decidió salir a defenderse. Acudió al Ministerio Público de la Acusación para denunciar violencia laboral, pero le dijeron que esa figura no está tipificada como delito. Ante esto, radicó una presentación por coacción y abuso de poder. Aún no ha tenido ningún tipo de respuesta del MPA, y lo mismo le sucedió con el área de Derechos Humanos y el Inadi en la provincia. Según señala, solo el Ministerio de Género de la Nación le dio su respaldo, y la lucha continúa. 

“Cuando uno está de empleado y hay una estructura con mucho poder es muy difícil salir, hablar y defenderte. Yo no sé si lo mío es valentía o no. Yo he visto situaciones que he dicho ‘no puede ser, basta’, porque lo único que hice fue simplemente no estar de acuerdo con determinadas cuestiones que consideré que estaban cuestionadas”, cerró. 
 

Audio: Escuchá el testimonio completo de otra de las mujeres que denuncia a Oscar Biagioni