Solemos denominar “derrame” a una mancha roja intensa (sangre) que se presenta por debajo de la conjuntiva, es decir, en la parte blanca del ojo. Por tal motivo se las denomina hemorragias subconjuntivales y son consecuencia de la rotura de alguno de los vasos sanguíneos o capilares de la conjuntiva.
Es muy frecuente que se presenten en forma espontánea, sin síntomas y no nos damos cuenta que la tenemos hasta que alguien nos alerta cuando nos dice “tenés un derrame en el ojo” o “tenés un hematoma”. También cuando nos miramos al espejo, especialmente al despertarnos y lo vemos y sobreviene el horror.
Calma, son generalmente benignas; no afectan la visión; no dejan secuelas; desaparecenasí como llegan, espontáneamente; y al cabo de 3 a 10 días aproximadamente. Norequieren tratamiento y solo ocasionan la molestia que todo el mundo nos diga “tenésun derrame en el ojo” o que nos molesten estéticamente.
Descartando por supuesto un golpe o traumatismo ocular, los motivos por los que se dan son variados. La mayoría de las veces no responden a ninguna causa específica, pudo deberse a frotarnos los ojos sin darnos cuenta, o al girar y refregar el ojo en la almohada al dormir.
Sin embargo, si aparecen, no está demás controlar la presión arterial sanguínea y la posibilidad diabetes. Debemos tener en cuenta que una de las principales causas de los derrames oculares son los tratamientos anticoagulantes. Por ello, si se presenta uno durante este tipo de tratamiento, debemos comunicarlo al médico que nos trata.
Otra causa frecuente son las denominadas maniobras de Valsalba, que se producen al estornudar y/o toser.
Consultá con el oftalmólogo ante cualquier duda.
Si bien resaltamos su benignidad y el no preocuparnos por los derrames, es importanteconsultar al médico oftalmólogo para que realice un completo examen y despejar dudas.
En este sentido, no debemos alarmarnos si los derrames amplían su tamaño o cambiande forma con el transcurso de las horas. Esto es normal y generalmente tienden adesplazarse y agrandarse hacia abajo por efecto de la gravedad. También pueden cambiar de color, como sucede con un simple hetamoma en la piel luego de un golpe.