Danisa Canale tenía 39 años, vivía en Gálvez, la misma ciudad donde había nacido. Una ciudad que la despidió hoy en medio del dolor que causó su asesinato.
En la tarde de este martes, recibió 10 mazazos propinados por su marido con quien vivía desde hace 7 años. La brutalidad del ataque y la gravedad de las heridas terminaron con su vida pese a los esfuerzos de los médicos del hospital Cullen. Ahí fue trasladada de urgencia luego que Jorge Trossero llamara al 911 para decirle a la policía 'vengan que maté a mi mujer'".
Trossero, de 50 años, en medio de una discusión tomó una maza martillo, según los primeros detalles brindados por la policía, y la golpeó hasta herirla de muerte.
"Lo que sorprende es la brutalidad del asesinato", afirma por LT10 Mayra Baradiotti, de la Mesa #Niunamenos de Gálvez, quien agrega: "No había antecedentes de violencia en la pareja, los allegados no comentan que hayan vivido una relacion complicada".
A lo mejor por eso la sorpresa, de ese "pueblo chico" donde se conocen todos, que no sale del shock ante el violento asesinato de una de sus habitantes.
Luego de la inhumación de los restos de Danisa en el cementerio municipal, vecinas y vecinos acompañaron a agrupaciones feministas en una marcha para repudiar el femicidio.
Mientras tanto, el femicida Trossero se encuentra alojado en la alcaidía de la Unidad Regional XV, en Coronda y este jueves sería imputado por el crimen.
Los hechos y la investigación
El fiscal de homicidios, Jorge Nessier, dijo que después de la imputación pedirá la prisión preventiva para acusado. Además, dio detalles de las pericias psicológicas realizadas a Trossero e indicó que "tenía plena conciencia de lo que hacía" y está ubicado en tiempo y espacio, según le manifestó la psicóloga que le realizó las entrevistas.
Nessier reveló que cuando llegó la policía a la escena del crimen, el femicida no dijo una sola palabra y se entregó sin mayor oposición. "No realizó ninguna manifestación. Solo confirmamos el llamado en el que manifestó que lo fueran a buscar porque había asesinado a su mujer". "Vengan porque maté a mi mujer", fue la estremecedora frase con la que Trossero admitió en la comunicación al 911 lo que había hecho y a la que hace referencia Nessier.
Cuando la policía llegó a la vivienda del matrimonio, Trossero estaba sentado junto a la mesa del comedor y el cuerpo agonizante de su mujer, tendido en el piso cubierto de sangre. "Él se mantuvo en silencio, mientras que del lugar secuestraron una maza de albañilería con la que habría cometido el crimen", precisó el fiscal.
La marcha realizada en Gálvez a las 20 fue replicada en la ciudad de Santa Fe donde las integrantes de la Mesa #Niunamenos local se convocaron en la Plaza de Mayo para acompañar el repudio.