El aislamiento social, preventivo y obligatorio ha modificado muchos de nuestros usos y costumbres, y agudizado ciertos hábitos. Por ejemplo, el de fumar.
Así, las personas que solían comprar cigarrillos según el consumo del día, ahora se proveen de a varios paquetes. Esto, sumado a ciertas dificultades que están teniendo las distribuidoras, genera un inicio de desabastecimiento que podría agravarse con el correr de los días.
Así lo advirtió al móvil de LT10 el referente de la Cámara de Kiosqueros de Santa Fe Ricardo Mascheroni.
Además, el comerciante comentó que, al menos en los locales del centro-sur de la ciudad, se incrementó un 20% la venta de preservativos.
También ocurrió lo propio con chocolates y golosinas. En este caso, lo atribuyó no sólo a la cuarentena, sino también a una cuestión estacional por la llegada de los primeros días frescos.