Libertad sería el protagonista de la temporada 2007/08. El equipo dirigido por Julio Lamas alcazaría el título en La Liga Nacional de Básquet.
En la primera fase, los Tigres comenzarían con una campaña muy firme con 12 triunfos y solo dos derrotas. Antes de la continuidad de la segunda fase, Libertad obtendría el Súper 8 en Mar del Plata (con un doble de Pablo Moldú a dos segundos del final) ya sin uno de sus extranjeros, Josh Pittman, quien finalmente sería reemplazado por el ex NBA, Laron Profit.
"Libertad llevaba dos o tres temporadas siendo uno de los mejores equipos del país, incluso ganando torneos, deseaba mucho ganar el título de Liga que le faltaba", recuerda su DT, Julio Lamas.
En el camino hacia el título vencieron por 3 a 1 en Cuartos de Final a Quilmes y por 3 a 0 a Peñarol en las Semifinales. En la final enfrentarían a Quimsa de Santiago del Estero a quien vencerían en cuatro juegos (84-75, 77-65, 77-84 y 81-92).
"No fue con química de entrada, se tuvo que ir construyendo. Los capitanes del equipo, Sepo (Ginóbili) y Andrés (Pelussi) fueron muy importantes liderando al equipo dentro y fuera de la cancha. Fue una temporada muy especial", sostiene el entrenador.
"Era un equipo veterano que sabía a lo que jugaba, que sabía muy bien lo que tenía que hacer en cada partido, de la forma que tenía que jugar y tenía especialistas en todas las áreas. Defensivamente era un equipo muy duro. La segunda mitad tuvimos jugadores en un nivel extraordinario, como la dupla de extranjeros", indica Sebastián "Sepo" Ginóbili.
"Era un equipo equilibrado, donde teníamos una defensa de 67 puntos, donde el mejor perimetral lo tomaba Pablo (Moldú) y vos sabías que tenías un problema menos. De los internos nos ocupábamos con Robert (Battle), que fue una de las mejores temporadas que tuvo acá en Argentina y teníamos la conducción y la cabeza fría de Sebastián (Ginóbili)", relata Andrés Pelussi.
Otro de los integrantes, Pablo Moldú, recuerda: "Llegué a Libertad para salir campeón. Teníamos un equipo que era candidato. Lo demostramos al principio. Encontramos un química rápidamente. Destaco la defensa, el profesionalismo era un virtud grande también. Tuvimos unos muy buenos playoffs. Lamas siempre tenía muy claro lo que quería, yo lo tengo como uno de los entrenadores más importantes que tuve. Disfruté mucho jugar con él y tomé mucho sus enseñanzas".