Este jueves, y después de tres meses sin actividad debido al avance del coronavirus, el gobernador de Santa Fe Omar Perotti firmó el decreto que habilita a abrir sus puertas a los shoppings de la provincia y centros comerciales.
A partir de este viernes, los ciudadanos pueden visitar nuevamente de estos lugares de esparcimiento, pero la etapa de "nueva normalidad" exige algunos cambios en su funcionamiento para garantizar la seguridad sanitaria de los santafesinos.
En diálogo con el móvil de LT10, el administrador del shopping La Ribera en el Puerto de Santa Fe, Leandro Souroujon, brindó precisiones sobre las actividades habilitadas, las medidas de higiene previas a ingresar, cantidad de personas permitidas, y un detalle interesante: cómo circular dentro del paseo.
En primer lugar, hay que decir que las únicas actividades permitidas en el shopping son las que tienen que ver con las ventas minoristas y mayoristas, pero no funciona el patio de comidas, ni el cine, ni el local de juegos para niños. Los locales gastronómicos sólo pueden vender con modalidad delivery y take-away, como fueron habilitados anteriormente.
Quienes asistan deben saber que ahora hay una sola posibilidad de ingreso en el acceso Sur del shopping, el más cercano al estacionamiento.
Antes de entrar, los visitantes deben cumplir con el estricto protocolo: una persona de seguridad les toma la temperatura, y hay un dispenser con alcohol en gel para higienizarse previamente. Un contador de personas administra la cantidad de gente que ingresa para no superar el aforo permitido: 1 persona cada 16m2, o aproximadamente 900 personas en simultáneo.
Al entrar, carteles con forma de flecha pegados en el piso indican el único sentido de circulación posible: la ida hacia el otro extremo del shopping se hace por el lado derecho, y la vuelta por el lado izquierdo. Es una suerte de avenida, donde los puestos ubicados en el centro hacen de "cantero divisorio". Esto debe respetarse y no es posible ir de un lado al otro aleatoriamente.
También la puerta de cada local tiene marcas que delimitan la distancia social entre los clientes y carteles con el protocolo a seguir dentro de cada uno de los negocios.
Sobre los bares ubicados en ambos extremos del shopping y que tienen ingresos particulares, Souroujon confirmó que aún no están habilitados a funcionar, y que esto se debe a una evaluación del Ministerio de Salud que "entendió que es mejor la no apertura, por temas sanitarios".