Facundo Marín, tiene 22 años y surgió futbolísticamente de Colón, donde estuvo hasta los 15 años. Luego, pasó a Boca, donde permaneció hasta los 18 años. Desde allí emigró al fútbol español, donde viste la camiseta del Extremadura.
Marín habló con Diez en Deportes por LT10 (AM 1020) donde contó cómo fueron sus primeros pasos en el fútbol y también contó de qué se trata su experiencia en el fútbol español.
En el inicio de la charla, comenzó contando: "Me agarró en casa, en mi querida Santa Fe. Tuve la suerte de llevar a mis viejos a conocer Europa, estuvieron un mes y medio. Sufrí una lesión y me vine a recuperar a Santa Fe y pasó todo el drama del coronavirus, con lo cual me tomó en mi ciudad y con mi familia. Estaba con mi novia en España pero en familia se pasa todo mucho mejor".
Luego contó cómo fue su historia futbolística hasta llegar al fútbol español y afirmó: "Comencé a pegarle a la pelota en mi querido Colón de Santa Fe, tenía dos o tres años, en la escuelita, luego fue un sin parar. Y gracias a Dios puedo vivir de esto. Fueron muy importantes en mi formación Martín Sánchez, Chupete Marini, Mamani, De la Crocce, Alejandro Gavatorta... Tuve un montón de gente, mucha gente importante que me enseñó muchísimo, con conceptos que los puedo utilizar hoy en mi carrera".
Sobre su llegada a Boca, sin debutar en Colón, dijo; "Mi sueño fue el de debutar y jugar con la camiseta de Colón, lo anhelo desde chiquito, para poder representar a mi ciudad. Pero en la vida pasan cosas, tuve que tomar decisiones, a los 15 años, cuando Colón se fue al descenso, nos comunicaron que teníamos que irnos del club, tenía la posibilidad de elegir entre Boca, River y San Lorenzo. Nos fuimos con Julián Chicco, Matías Roskopf y estuvimos tres años, fue hermoso mi paso por Boca".
"Mi primera reacción cuando me enteré de Boca no fue buena, porque soy fanático de Colón. Pero otra posibilidad no había, teníamos que irnos. Pero entendí que la carrera es así y hay que demostrar en todos lados", agregó Marín en otra parte de la charla con LT10.
Mientras que sobre la vida en Buenos Aires, reveló: "Siempre estuve en el Predio de Colón y a los chicos que vivían en la pensión siempre los admiré por estar lejos de la familia, siempre tuve esa incertidumbre, fue un paso muy importante en mi vida, fue cuando me convertí en hombre, lejos de mi familia. Boca tiene las mejores instalaciones porque nos pagaba todo, para dormir, comer y nos pagaba un sueldo. Estaba en Disney. Lo viví y disfruté al máximo, no me arrepiento de haber ido ya que sirvió para ser lo que soy hoy en día".
"Sabíamos que no iba a ser fácil en Boca, hay que pagar el derecho de piso. Se necesita un poco de suerte, pero si trabajas y tenés las ideas claras, siempre en algún momento, si vas con un objetivo claro esa posibilidad tiene que llegar, está luego en cada uno saber aprovecharla", afirmó Marín
En cuanto a su llegada a Europa, reveló: "A los 18 años siempre tenés ganas de jugar en Europa, por lo que se dice y habla. Mi representante me dijo que estaba la posibilidad de probarme en Italia, en Peruggia, donde me ofrecieron contrato. Pero me tuve que volver por un tema de pasaportes. Luego me dijo que estaba lo del Extremadura, que si superaba la prueba me quedaba. Me fue muy bien el primer día, me ofrecieron dinero, un contrato por tres años, y ahora estoy cumpliendo el último año, con opción de renovar por uno o dos años más. Ahora estamos negociando pero está todo frenado con lo del coronavirus. Tuve un salto rápido a Europa, fue un sueño de chiquito que se me dio".
También se le preguntó por Gustavo Marín, por su papá y su paso por La Salle y contó: "Desde chiquito me dijeron que si jugaba un 30% o 40% de lo que jugaba mi viejo iba a jugar en Primera División, me quedaba sorprendido. Mucha gente me dice que fue un fenómeno, hoy en día lo es haciendo jueguitos. Me siento orgulloso que haya jugado en Colón y en la Selección. Tengo el contrato encuadrado de cuando lo vendieron de Colón a Boca en 20.000 o 30.000 dólares, que era muchísimo para esa época".
En cuanto a cómo se maneja en su aventura europea en relación a su familia, detalló: "La que sufre es mi mamá, cuando me fui a los 15 años se largó a llorar como nunca la había visto, pero entendió que era mi sueño, mi posibilidad de poder crecer, me dejaron volar. La familia es todo, es lo más importante, el motor que me incentiva a pelearla día a día. Tenerlos a ellos es muy lindo".
"También lo sufre la familia de mi novia, la conocí en febrero, en julio le dije que me iba a España y se fue a vivir conmigo. Podíamos vivir con mi sueldo, también ahorrar, hicimos los papeles para que pueda estar tranquila. Los dos estamos viviendo allá, es un paso más en la vida de un futbolista", agregó en otra parte de la charla con LT10.
Y agregó: "Cuando me fui de Boca tuve la posibilidad de volver a Colón, pero no se pudo dar. Jugar en Colón es mi sueño, lo mejor que me puede pasar. Pero triunfar en el fútbol, en España o Italia es mi objetivo".