Un santafesino llamado Néstor Aguilar tuvo que viajar en abril a Mendoza, en plena pandemia, para cuidar de su madre enferma. Luego de dos meses y medio, Aguilar decidió traer a su mamá de 90 a Santa Fe para poder atenderla mejor.
Obviamente, para emprender este viaje, en la situación de emergencia que estamos atravesando, el hombre tuvo que sacar todos los permisos que corresponde.
"El regreso a Santa Fe fue de terror. Cuando llegué al límite de San Luis y Córdoba nos frenanaron y nos tuvieron tres horas en el auto y en el peaje, le negaron el sanitario a mi mamá de 90 años discapacitada. Lo que querían era juntar autos para llevarnos custodiados hasta la frontera", señaló indignado Aguilar.
Además, el santafesino agregó que nunca le pidieron los permisos y que los policías estaban sin ningún tipo de protección.
Finalmente, Aguilar remarcó que "yo no puedo creer el trato inhumano que nos dieron. En ninguna provincia nos destrataron de esta manera. En un momento de ira, le pegué varias patadas a la puerta del gerente del peaje y la policía no hizo anda porque estaba azorada de lo que nos estaban haciendo. Esto tiene que ver con una orden de arriba".