Jair Bolsonaro protagonizó un insólito episodio en el Palacio de la Alvorada, en Brasilia, ante las cámaras de a canales de TV minutos después de haber confirmado que su hisopado de coronavirus había dado positivo.
Mientras el Presidente de Brasil dialogaba con un grupo de periodistas en las afueras del Palacio y manteniendo poca distancia social, decidió sacarse el barbijo para que los televidentes vieran que estaba "todo bien".
"Vean mi cara: todo bien, tranquilo gracias a Dios”, mencionó Bolsonaro mientras saludaba con la mano. "Quiero agradecer a todos los que rezaron por mi, esta todo bien gracias a Dios", agregó.
Y sostuvo: "Pueden chequear que no tengo problema".
El presidente de Brasil se había sometido a una nueva prueba tras presentar durante el fin de semana algunos de los síntomas propios.
Además, Bolsonaro, que parecía cansado, indicó que ya comenzó a tomar hidroxicloroquina, el controvertido fármaco cuyo uso defendió en numerosas ocasiones, aún sin pruebas científicas de su efectividad.