Para las horas de home office tener tu lugar de trabajo decorado y práctico te ayudará en tu labor. Tomá nota de lo que podés hacer para sacarle provecho.
Adaptá tu mobiliario
Uno de los temas principales es que las casas no están pensadas para trabajar. Para ser más productivos y adaptarla a esto, es necesario hacer una serie de cambios, entre ellos, el mobiliario.
Aunque los horarios y las jornadas varían para cada persona, la mayoría tendrá que pasarse horas sentado, por lo que si la silla no es adecuada la cosa no será fácil. Estar en una incómoda afectará a la salud física (dolores de espalda, de cabeza, tirones…), a la salud mental (ya que supone un estrés añadido al trabajo y a la pandemia) y al rendimiento (ya que es imposible producir o crear de la misma forma que cuando teníamos un mobiliario ergonómico).
Por todo ello, es recomendable adquirir sillas de estudio o de oficina. La mesa, la computadora o el mouse son también importantes para crear un entorno cómodo, a pesar de las dificultades añadidas que podamos tener al compartir casa.
Trabajá en lugares luminosos
Otro factor a tener en cuenta es la iluminación, ya que al trabajar en la mayoría de los casos forzamos la vista o necesitamos leer documentos. Por eso, una correcta iluminación, si puede ser natural, mejorará la situación. Además, tener acceso al exterior y a la luz natural mejora el estado de ánimo.
Separá espacios, no mezcles ocio y trabajo
Es fundamental separarlos. Si trabajamos en la mesa del living, debemos hacer la pausa de la comida en otro lugar. Es recomendable separar el ocio del trabajo en tiempo y espacio, para que la mente descanse el máximo posible.
Prestá atención a los colores
La salud mental, la física y el rendimiento laboral están relacionados. Cuanto más calma nos transmita el lugar de trabajo, mejor. Es por eso que debemos localizarnos en lugares con paredes de tonos claros o pastel, que transmitan tranquilidad en lugar de nerviosismo.
Además, hay que evitar poner objetos o fondos llamativos cerca de la pantalla o del lugar en el que trabajemos, pues desviarán la atención.
Rodeate de plantas
En la misma línea que los colores, tener plantas cerca aportará tranquilidad y sensaciones agradables que tendrán un impacto positivo en el rendimiento laboral.
Para que nuestro rendimiento sea el idóneo, debemos sumar a todo esto algunos hábitos saludables. Aunque trabajar desde casa tiene muchas ventajas, también conlleva riesgos, como el no saber parar o el aumento del estrés.
Por eso es vital mantener unos horarios dentro de lo posible, tanto de trabajo como de comidas, para que el cuerpo y la mente se acostumbren a una rutina, aunque sea diferente a la que estábamos habituados. Es imprescindible descansar correctamente.