El destino le hizo un guiño a Fernando Márquez, ya que le tocó entrar cuando el partido estaba empatado y Unión quedaba eliminado de la Copa Sudamericana. Fue así como el árbitro sancionó penal y Cuqui plasmó toda su jerarquía con una ejecución formidable para poner el 2-1 ante Emelec. Un resultado que no se modificaría para decretar la clasificación a los octavos de final por primera vez en la historia.
"Antes de salir para al estadio, el DT nos preguntó qué significaba para esto y coincidimos que era muy importante, Quedó demostrado. La autocrítica pasa por haber desperdiciado tantos goles, porque el resultado debió ser más amplio", apuntó el delantero en la conferencia de prensa virtual.
🇦🇹🙌 ¡Un momento que quedará para la historia de @clubaunion! Un rechazo que se gritó como un gol y los festejos a pura emoción de los jugadores. ¡Entre los 16 mejores de la #Sudamericana! pic.twitter.com/GJnRLFWxwg
— CONMEBOL Sudamericana (@Sudamericana) November 6, 2020
Luego, contó cómo fue la situación que terminó con el tiro desde los 12 pasos: "Cuando el árbitro cobró penal, solo pensaba en patearlo. Estaba (Gabriel) Carabajal designado y le consulté si podía patearlo y agradezco el gesto de que me lo permitiera. Fue una alegría inmensa cuando paso la línea siendo un premio por lo hecho en el primer tiempo, donde mostramos total supremacía".
"Este es el gol más importante de mi carrera. Muy contento por mis compañeros, porque nuestro comienzo no fue bueno en los amistosos y demostramos que en los partidos oficiales tenemos una idea clara y ojalá la podamos sostener", agregó.
En el final, rememoró con emoción: "Se me vienen muchos recuerdos de mi vida, de cuando era chico y gritar los goles por la radio. Estar en la historia del club me pone contento, sin dejar de resaltar la labor de los muchachos".