La comitiva oficial encabezada por la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, llegó este domingo a Moscú, donde durante la semana que viene concretará los detalles sobre el desarrollo de la vacuna rusa contra el coronavirus Sputnik V, informaron desde Presidencia de la Nación.
Vizzotti y Nicolini ya viajaron a Rusia en el mes de octubre para conocer más sobre la vacuna. Luego, el presidente Alberto Fernández anunció a través de la agencia de noticias rusa Sputnik, en una entrevista exclusiva, que el Gobierno adquiriría 10 millones de dosis de Sputnik V.
El pasado miércoles, el Presidente firmó un contrato con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF, por sus siglas en inglés) para inmunizar a diez millones de personas entre enero y febrero, con una primera remesa de 300.000 antídotos que llegarán antes de fin de año.
"Vamos a poder contar con las dosis suficientes para poder vacunar entre enero y febrero a diez millones de argentinos y argentinas", dijo Fernández en esa oportunidad.
La Sputnik V tuvo una eficacia superior al 95% a los 21 días de la segunda dosis en la prevención de la infección por coronavirus, según resultados preliminares de sus estudios de fase 3. Se trata de una vacuna que utiliza una plataforma (o tecnología) llamada de "vectores no replicantes".
Los vectores son virus que se modifican genéticamente para que no tengan capacidad de reproducirse en el organismo (y por tanto inocuos) y se usan para transportar material genético del virus del que se quiere inmunizar.
En este caso, la Sputnik V usa adenovirus humano como vector y, a diferencia de otras candidatas, utiliza dos adenovirus (uno diferente en cada dosis) para provocar una mayor y más duradera respuesta en el sistema inmunológico.