El exvicepresidente Amado Boudou pidió “anular” el juicio por el caso Ciccone por el que fue condenado a cinco años y medio de prisión debido a que “la sentencia es nula y no hay ninguna prueba”, al tiempo que consideró que “hay que estar preocupados por la actitud persecutoria del Poder Judicial” tras conocerse el miércoles el revocamiento de su prisión domiciliaria.
Luego del fallo del juez Daniel Obligado que revocó a prisión domiciliaria del expresidente a horas de la feria judicial, Boudou dio este jueves una entrevista a El Destape radio en la que afirmó: “Lo mejor que le podría pasar a Argentina es que se revean todas las truchadas que pasaron estos años. Eso es lo que realmente sanaría. En mi caso hubo testigos comprados, la denuncia original fue hecha por un servicio de inteligencia y no hay ninguna prueba”.
En esa línea, sentenció: “Creo que hay que anular mi juicio y volverlo a hacer. La sentencia es nula. No hay un hecho jurídico en mi causa porque son sentencias judiciales que confirman sentencias mediáticas”.
Sobre el fallo judicial, señaló que “salió antes en La Nación a que fueran notificados mis abogados”.
“Es un acto de crueldad el fallo”, manifestó el economista, quien reflexionó: “Sin duda pensé que a un año en el poder -del Frente de Todos- el lawfare no iba a ser así. Yo en algún sentido soy una anécdota. La principal perseguida política es -la vicepresidenta- Cristina (Fernández de Kirchner”, denunció.
Boudou advirtió que “hay que estar preocupados por el poder persecutorio del Poder Judicial", ya que "el asesinato de Floreal Avellaneda duerme en la Corte hace años” pero “se ve que el trabajo judicial es selectivo”.
“Mi causa estuvo pocos meses en la Corte y luego resolvieron sin mirarla. Y tienen otras hace años. Está claro que tratan muy distinto cada tema", añadió.
En esa línea, agregó: “La Corte tiene hace siete años el caso de Floreal Avellaneda, un joven de 15 años asesinado en la dictadura. Y la mía la resolvieron sin mirarla", por lo que fustigó: "La Corte tiene un sesgo de ayudar a quienes cometieron delitos de lesa humanidad".
“Mi preocupación es la condena trucha que tengo, no la domiciliaria o no”, dijo el exvicepresidente, que además remarcó que “el juez Obligado venía pidiendo informes, pero con dos días de presión de Clarín toma una decisión sin esperar los informes que él mismo pidió”.
Asimismo, concluyó: “Tapan la sanción de la ley del aborto y la reforma jubilatoria con una agenda judicial que es poco clara".