El covid no sólo afecta durante el transcurso de la enfermedad, sino que tiene consecuencias en aquellos pacientes que lograron recuperarse. Este efecto secundario fue denominado “niebla mental”, y es un síndrome que consiste en la aparición de blancos o lagunas a los pocos días de la recuperación.
“Se ha observado que si bien la mayoría de las personas logran recuperarse del síndrome respiratorio agudo, tiempo después le aparecen como blancos. Se agota muchísimo mentalmente por ejemplo por cruzar la calle, esos 10 segundos de atención lo agotan, no puede sostener la atención para mirar una película, se olvidan algunas palabras” explica Ignacio Rintoul, investigador del CONICET y docente por LT10.
Sin embargo, al ser una enfermedad tan nueva e incierta, se sigue trabajando e investigando sus efectos.
“Lo que hicimos, es adaptar el desarrollo biomaterial a los casos de covid. Por ejemplo cuando uno se deprime, se agota, o cualquier respuesta emocional, neurológica o física tiene su correspondiente químico adentro de su cuerpo. La depresión uno la puede medir midiendo algunos cambios hormonales; cuando uno está agotado exuda mayor cantidad de ácido láctico”, explica el profesional que busca su correlato en los recuperados con coronavirus.
Por este motivo, desarrollaron unos biosensores –que aún se encuentran en periodo de prueba- que “se apoyan en la piel y miden la química del sudor y a través de saber que pasa en la composición química del sudor, inducir lo que está pasando dentro del cuerpo”. Además, a este sensor “le estamos integrando otro que es una especie de ministester que puede medir corrientes eléctricas ínfimas, apoyado en el cuero cabelludo puede medir la actividad eléctrica del cerebro y así cuantificar, medir, tener un número de este efecto de la niebla mental que se manifiesta en un tercio de recuperados de covid”.