Renovar la casa es muy lindo, sin embargo, hay una parte de este proceso que es un poco tediosa: la limpieza posterior a los arreglos. A continuación, cómo quitar el polvo y demás después de una construcción.
Usá un limpiador cremoso para manchas rebeldes en pisos y azulejos. Leé las instrucciones de uso en la etiqueta del envase. Para el piso de porcelanato enjuagá con agua limpia para que no queden marcas. Para los azulejos del baño, poné un limpiador cremoso en una esponja o trapo húmedo y esparcí sobre estos frotando suavemente. Leé las instrucciones en la etiqueta antes del uso. Luego, secá con un paño limpio.
Paso a paso para los pisos de porcelanato:
– Barré o pasá la aspiradora para quitar el polvo.
– Si hay manchas rebeldes, quitalas con un limpiador cremoso y una esponja húmeda.
– En un balde, mezclá agua con un limpiador de pisos suave, no oleoso.
– Pasá el agua enjabonada con un trapo de piso. Dejá actuar por unos minutos.
– Enjuagá con agua limpia para que no queden marcas de jabón.
– Secá bien con un trapo limpio.
Para limpiar los vidrios después de una obra, mezclá un litro de vinagre con cinco litros de agua tibia en un balde. Humedecé un paño en la mezcla y comenzá a limpiar. Secá los vidrios con un puñado de papel de diario. Usá guantes para no mancharte las manos de tinta.
Una de las peores cosas que deja una renovación es el polvillo. Sea un excedente de cemento o el polvo de una pared agujereada, parece estar en todos lados. Para una limpieza a fondo, tené en cuenta estos tips:
– Si hay polvo en una zona amplia de la casa, abrí una ventana y poné un ventilador prendido mirando hacia fuera. Esto ayuda a que las partículas de polvo del aire desaparezcan y tendrás menos para limpiar después.
– Para sacar el polvo de las paredes, pasá un lampazo húmedo por la superficie.
– Limpiá los muebles con un paño húmedo, para sacar el polvo. Esperá uno o dos días y repetí esta acción.
– Barré el piso o pasá la aspiradora y limpiá con un trapo húmedo.
Limpieza final de construcción
Ya limpiaste lo más grueso, ahora hay que prestar atención a los detalles. Limpiá las puertas, interruptores de luz, electrodomésticos, teléfono, y aprovechá para redecorar.