"Ese partido me marcó para toda la vida. Fue un antes y un después en mi relación con los hinchas y de mi para el club. Se metió muy adentro de mi corazón", contó en charla con LT10 Nelson Agoglia, quien recordó el gol en la victoria agónica en el Clásico del 5 de octubre de 1997 por 2-1.
En la previa de lo que será una nueva edición del duelo entre Colón y Unión el próximo domingo, por ahora a las 17.15, Pitufo le reconoció a Diez en Deportes que ese "es el gol más importante de mi carrera por lo que significaba y significa. Por lejos lo es. Es increíble y a veces no puedo creer tanto cariño conmigo. Son varias generaciones, con chicos que ni si quiera me vieron jugar. Se me infla el corazón por todo esto. Es algo hermoso".
Respecto a cómo se vivió la previa, relató: "Ya en el fixture se empezaba a hablar y un mes antes la ciudad se volvió una locura. La gente nos hacía sentir que el Clásico había que ganarlo. Se vivía a full. La gente te exigía y tuvimos la suerte de ganar varios".
"Son partidos que se viven con nerviosismo, pero después lo asimilás mejor. Hasta que no salís a la cancha, no se te pasa la ansiedad. Es una sensación increíble. Teníamos una mística en la que nos sentíamos ganadores y tomábamos los clásicos así, porque entendíamos que siempre teníamos la chance. No importaba quién llegaba mejor", apuntó.
Luego se metió en su paso por el Sabalero: "Al comienzo me costó adaptarme, porque no le encontrábamos la vuelta al equipo. Es una presión muy grande jugar en Colón. Después crecí me fue bien y creo que fue lo mejor de mi carrera. Muy contento por lo que pude darle al club".
"Si era por mi señora, nos quedábamos a vivir en Santa Fe. Yo siempre fui muy familiero y, como mis viejos estaban grandes, me volvi a Buenos Aires. Pero nos encantaría incluso ir ahora en Santa Fe y no vaya a ser que se dé (risas)", bromeó.
Asimismo, no pudo evitar comentar que está al tanto de todo lo que pasa: "Todos los partidos de Colón veo. Lo sigo siempre, porque soy un hincha más y hoy está pasando un buen momento. Este es el partido más importante que va a jugar Colón, porque ganar un clásico es clave desde lo anímico. Si fuera el DT, apostaba por poner a todos para tratar de ganar".
"Es normal que a los equipos empiecen a respetarlo más y se cuiden, como a este Colón. Nos pasó a nosotros en el 97. Pero ningún equipo puede mantener una regularidad durante 13 partidos y hay bajones. Creo que Colón llega bien y ya está clasificado, que te da tranquilidad. Creo que será el Clásico más importante de los últimos años", aseveró.
Volviendo a ese gol de 1997, admitió: "Creo que fue a los 48' del segundo tiempo. Tengo guardado el relato en mi cabeza. Después metí el gol y la locura donde me subí al alambrado. Bajó Dios con la varita ese día y me tocó a mí para que haga ese gol. Tuve solo el instinto de pegarle, porque ya terminaba. Uno siempre tiene referencia de donde está el arco, pero no la quise poner ahí. Fue una sensación increíble".