Tras meses de negociaciones ultra confidenciales con los ejecutivos de Pfizer, el Gobierno anunció hoy una modificación clave a la ley de vacunas -vía decreto de necesidad y urgencia- para destrabar los cortocircuitos legales que impiden cerrar un acuerdo con el laboratorio norteamericano desde el año pasado.
El anuncio estuvo a cargo de la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, dos de las funcionarias que estuvieron sentadas a la mesa de negociación con la gigante de los Estados Unidos para arribar a un acuerdo.
Anunciaron la supresión de la cláusula de negligencia que estaba en la ley y que había generado reparos de los laboratorios. También se dispuso la creación de un fondo de reparación para eventuales dañados por la vacuna y el mantenimiento de cláusulas de confidencialidad, entre otras cuestiones.
Ibarra se adelantó al pedido de detalles sobre los futuros contratos, y advirtió que en los mismos “rigen cláusulas de confidencialidad”.
“Esto es usual, no es solo para este tipo de vacunas. La ley regula esto, motivo por el cual los funcionarios públicos debemos respetarlo. Vamos a tratar de poder tener amplitud en la información, pero no vamos a poder dar algunos datos específicos porque tenemos que respetar la ley. Hay cosas que no vamos a poder decir por el respeto a la legalidad y no por no querer dar información”, advirtió Ibarra.