India superó los 400.000 muertos por coronavirus desde el inicio de la pandemia por un rebrote impulsado en las últimas semanas, en parte, por la variante Delta, considerada más contagiosa y que se expande en varios países, generando récords de casos y la reimposición de restricciones.
El país asiático, de más de 1.300 millones de habitantes, registró 400.312 decesos, según el último informe oficial, que agrega que la cifra de contagios trepó a 30,5 millones, informó la agencia de noticias AFP.
Muchos expertos, sin embargo, estiman que el balance de muertos supera el millón, tras el virulento aumento de casos en abril y mayo atribuido a la variante Delta, detectada por primera vez en este territorio.
El 24 de mayo pasado India había superado las 300.000 muertes y se proyectaba una tendencia a la baja, pero sumó 100.000 nuevos fallecimientos en poco más de un mes, en un rápido ascenso atribuido a esta mutación, más contagiosa, y al exceso de confianza del Gobierno del primer ministro Narendra Modi, después de anunciar que el país había superado la pandemia en enero.
Actualmente, el número de contagios diarios disminuye de forma significativa y muchas restricciones se fueron levantando, lo que hace temer nuevos rebrotes en los próximos meses.
El número de contagios diarios disminuye de forma significativa y muchas restricciones se fueron levantando, lo que hace temer nuevos rebrotes.
Rusia
Otro país donde esta variante se expandió con fuerza es Rusia, cuyas autoridades descartaron imponer un confinamiento de la población pese a haber reportado 679 nuevas muertes asociadas al coronavirus, un récord por cuarto día consecutivo.
"Nadie quiere confinamientos" y la idea de aplicarlo "no ha sido tratada", declaró a la prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, quien agregó: "Para que ello no ocurra, debemos vacunarnos todos lo más rápido posible".
La cifra de fallecimientos desde el inicio de la pandemia asciende a 136.565, informó el centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus, mientras los contagios de la última jornada fueron 23.218, la cifra más alta desde mediados de enero, cuando el país salía de una segunda ola de coronavirus.
Estos récords negativos no modificaron tampoco la normativa sobre la organización de eventos multitudinarios, como el caso de la Eurocopa en San Petersburgo, la segunda mayor ciudad del país, donde este viernes se disputó un encuentro de cuartos de final entre España y Suiza.
La cifra de fallecimientos desde el inicio de la pandemia asciende a 136.565 en Rusia.
Portugal
Otro país severamente afectado por esta mutación es Portugal, donde casi la mitad de los diez millones de sus ciudadanos estarán otra vez sometidos a un toque de queda nocturno a partir de este viernes para frenar el rebrote de Covid-19.
La medida se aplica a los 45 municipios más afectados por los contagios, situados sobre todo en las regiones de Lisboa y del Algarve (sur), además de ciudades del norte como Oporto o Braga.
En total, cerca de cuatro millones de personas se ven afectadas por este retroceso del desconfinamiento gradual, que Portugal inició a mediados de marzo tras una situación sanitaria crítica a principios de año.
Casi la mitad de los diez millones de portugueses estarán otra vez sometidos a un toque de queda nocturno.
Más países complicados por la variante Delta
No es la única nación que impuso nuevas medidas ante el avance de esta variante: las autoridades de República Checa anunciaron que endurecerán las condiciones de entrada al país debido a la expansión de la variante Delta, confirmó un vocero del Ejecutivo.
Pero sin dudas el país europeo más afectado por esta mutación es Reino Unido, que vio un aumento de casi cuatro veces en los casos de la variante Delta en menos de un mes, según datos publicados por la agencia de salud inglesa Public Health England.
Una de cada 260 personas en Inglaterra tuvo Covid-19 en la última semana, de acuerdo con datos oficiales, una tasa similar a la que se vio por última vez en febrero.
El último balance da cuenta de 27.125 nuevas positivos, pero 27 nuevas muertes y 304 hospitalizados, cifras relativamente bajas en comparación con los casos que se explican por lo avanzada de la campaña de vacunación en la isla.
Previendo esta situación, el primer ministro japonés Yoshihide Suga, ya advirtió que es "posible que no haya espectadores" en los Juegos Olímpicos que empiezan en tres semanas en Tokio.
Una decisión debería tomarse en la próxima reunión de las cinco partes implicadas (Comité Olímpico Internacional y Paralímpico, Gobierno japonés, autoridades locales de Tokio y comité de organización), declaró la ministra de los Juegos, Tamayo Marukawa.
Por otro lado, Australia, que combate un foco de contagios con varias ciudades confinadas, anunció hoy que podría reducir a la mitad el número de personas a las que permite ingresar al país semanalmente.
Para evitar que lleguen contagios del exterior, solo 6.000 personas están autorizadas cada semana a aterrizar en vuelos comerciales en Australia. Luego son sometidas a una cuarentena obligatoria de dos semanas en un hotel.
Esta cuota pasará a ser de unas 3.000 personas semanales de aquí a mediados de julio, dijo el primer ministro, Scott Morrison.
Este anuncio tiene lugar en momentos en que la población está cada vez más exasperada por las restricciones anticovid, las fallas en los dispositivos de cuarentena y una campaña de vacunación que avanza lentamente.
Por otro lado, los habitantes de las ciudades de Sydney, Brisbane y Perth, es decir un total de 10 millones de personas, seguían confinadas tras la detección de múltiples brotes.