El Hospital de Campaña o Militar legó a la ciudad de Santa Fe a mediados del mes de marzo y se instaló en el predio del Liceo Militar, frente al hospital José María Cullen, con el objetivo de brindar respaldo a un nosocomio que llevaba más d eun año haciendo frente a la pandemia por el coronavirus.
Sin embargo fue recién en mayo cuando comenzó a recibir pacientes. Esta extensión del Hospital Cullen permitió sumar 30 camas (con la posibilidad de ampliarse a 40) para pacientes no covid, de baja complejidad.
Hoy, a tres meses de su puesta en actividad, continúa con un funcionamiento pleno. "Sigue funcionando, se usó muchísimo, ahora sólo tenemos tres camas libres" contó Andrea Balzarini, encargada del mismo.
"Fue un proceso de aprendizaje para todos. Hemos tenido pacientes de todo tipo de patologías, que es algo que no suele suceder porque cada uno tiene su servicio" agregó sobre una metodología de trabajo que generó que en un mismo espacio sean atendidos pacientes con distintas enfermedades y con distintas necesidades.
Con un plantel de médicos que cruza por la manga de un lado al otro de Avenida Freyre, 33 camas disponibles (31 ocupadas), 20 enfermeros fijos y 5 personal de servicio, hoy sigue brindando el servicio para el que fue instalado.
Tal es el sentimiento de pertenencia que crearon los trabajadores, que algunos aseguran que van a extrañarla cuando ya no esté.