Unión fue al Tomás Adolfo Ducó de Parque Patricios para enfrentar a Huracán, con la clara consigna de confirmar su levantada con un nuevo triunfo, que lo acerque a los primeros puestos del Torneo de Primera División y que lo meta de lleno en la pelea por ingresar a las copas internacionales de 2022.
Sin embargo, se volvió con un empate sin goles ante el Globo que sabe a poco en cuanto a la sumatoria de puntos, pero que tiene una gran importancia ya que demostró nuevamente solidez defensiva para mantener el arco en cero, con lo cual ya son dos partidos donde no le convierten.
En el camino se presenta Talleres, a quien recibirá el próximo domingo en el estadio 15 de Abril, a partir de las 13.30, por la séptima fecha del certamen. La T, en tanto, debe enfrentar este lunes a San Lorenzo, en Córdoba, con lo cual tendrá menos tiempo de recuperación que el Tatengue.
Pero no todas son buenas para Unión, ya que el Vasco Azconzábal deberá meter mano de forma obligada en el equipo por la expulsión de Lucas Esquivel, quien desde que apareció en el equipo titular le dio muchas soluciones al entrenador, siendo clave en el andamiaje defensivo y llegando con mucha sorpresa y criterio al ataque.
De esta manera, la semana de trabajos en Casasol tendrá pendientes de qué idea tendrá el Vasco para el partido ante Talleres, ya que podría hacer un cambio nombre por nombre, donde podrían aparecer Emanuel Britez (podría jugar como lateral/volante Claudio Corvalán), el chileno Nicolás Peñailillo y Gastón González.
En tanto que si se decide por cambiar el esquema podría volver a parar al equipo con un 4-4-2, ingresando otro volante por Esquivel, y manteniendo la estructura defensiva, con Fernando Márquez y Daniel Juárez.
Si bien es apresurado dar diagnósticos cuando falta tanto tiempo para el próximo partido, la semana de trabajos para el Vasco arrancará con al certeza de que no podrá repetir el equipo que viene de jugar los dos últimos partidos, donde goleó a San Lorenzo y empató ante Huracán.