Ante la espera de una tercera ola de covid y la flexibilización de actividades, desde la Sociedad Argentina de Pediatría explicaron que, si bien la variante Delta es mucho más contagiosa, su agresividad con respecto a los niños “no es distinta a las otras que circularon”.
Omar Tabacco presidente de la Sociedad, aseguró que aún estamos en alerta, pero no en término de alarma, “si preocupación y ocupación para estar preparados para la famosa tercer ola, como pasó en todo el mundo cuando se instaló la variante Delta”.
En este marco, afirmó que, como parte del protocolo escolar, lo fundamental es que “si el chico está enfermo no mandarlo”.
Ante esta situación, están “revisando la posibilidad de modificar algo los protocolos en los términos de burbuja ya que se están dando muchos aislamientos por casos que no terminan siendo nada”. De esta forma, evalúan que se aíslen aquellos que se sientan adelante, atrás y a los costados, y no todo el curso.
También destacó la importancia de no relajarse con los cuidados, puntualmente el uso del tapabocas y las medidas de higiene y distanciamiento social.
Las consecuencias de la pandemia en la salud de los niños
El especialista también se refirió a los problemas emocionales y físicos que causó la pandemia en los menores, sobre todo en aquellos entre los 6 y 18 años.
A nivel emocional, manifestaron ansiedad, angustia, miedo, depresión, enojo, y esto “se expresa con trastornos de conductas o en el cuerpo con los trastornos digestivos”. En cuando a los problemas físicos, se dio un importante aumento en los trastornos de sobrepeso y obesidad.
“En el 2019, un informe advertía que, entre los 5 y 17 años, el 41% de los chicos tienen sobrepeso y obesidad. Y ahora es notable la cantidad de peso que han ganado durante la pandemia y seguro estarán por arriba de ese 41%” sostuvo Tabacco.